■ Para la selección deben dar nuevo impulso a la concepción moderna de las obras mediante su presentación y diseño
■ La exposición reabrirá el 7 de enero y permanecerá hasta el 8 de febrero
Carlos Paul
Al margen de su lectura o estudio, ¿qué hace que un libro sea bello?
Para la Fundación Arte del Libro (Stiftung Buchkunst), de Alemania, se deben considerar diversas exigencias tanto estéticas como funcionales; es decir, la relación acertada entre contenido y forma: un diseño en el que armonicen desde la portada y el forro hasta la tipografía, las ilustraciones y el papel.Con base en tales principios, por cuarta ocasión diseñadores y público en general podrán apreciar la muestra bibliográfica Los libros alemanes más bellos, colección 2006, que se exhibe en la Biblioteca de México José Vasconcelos.
La selección de los volúmenes, considerados por dicha fundación como los “más bellos”, se realiza cada año desde 1984, para participar por el Premio de la Stiftung Buchkunst. En México se han exhibido las colecciones de 2003 a 2005.
Cada año, la Fundación Arte del Libro invita a editoriales y creadores alemanes a participar, aunque también lo pueden hacer extranjeros, siempre y cuando su producción técnica se haya efectuado en ese país.
Son candidatos a ser seleccionados “aquellos libros que denoten alto grado de compromiso de la editorial y de los involucrados en su concepción, pero sobre todo aquellos que den un nuevo impulso a la concepción moderna de libros mediante su presentación y diseño”.
Para la edición 2006 se recibieron 943 volúmenes, provenientes de 424 editoriales, de los cuales 45 fueron seleccionados, y el jurado recomendó otorgar un reconocimiento a 12 libros más.
Chicas de seda artificial, 25 clásicos y un Ulises
En esta ocasión la muestra bibliográfica, que fue inaugurada en diciembre pasado por Eva Hackenberg, directora de la Biblioteca Goethe-Institut Mexiko, acompañada por Miguel García de la Rosa, subdirector de Promoción Editorial de la Biblioteca de México y Beatriz García, se encuentra integrada por 42 títulos, entre libros para niños, técnicos, de arte, guías de diseño y literatura en general.
Entre ellos se pueden apreciar La chica de seda artificial, ilustrado en dos colores. “Los dibujos a lápiz de perspectivas definidas, con una irritante y marcada borrosidad, retoman el carácter temporal del texto y armonizan con el tipo de letra seleccionada.”
Ciudad de colisión es un libro de “tema complejo: Jerusalén como ciudad dividida. Se presenta de manera adecuada y accesible. Las líneas oblicuas no sólo son efecto compositivo, sino que citan con congruencia el esgrafiado de los mapas. El tipo de letra y el papel enfatizan el carácter documental”.
Trabajo sexual es un volumen, cuya ficha informativa apunta: “El distintivo color amarillo que se introduce desde la cubierta fue desde hace siglos el de los marginados, y permite una aproximación contextual inmediata al tema. En contraste con el negro llama la atención a la vez que señala peligro”.
25 clásicos integra igual número de “extraordinarios retratos fotográficos en blanco y negro de célebres músicos”.
Se exhibe también Ulises, de James Joyce, con “diseño de cubierta osado, coherente coloración rojo brillante y una encuadernación insólita y confortable para ser un libro de bolsillo”.
La Orquesta Filarmónica de Berlín “es un libro monumental, que a primera vista parece opulento e infunde temor; en una segunda mirada es sorprendentemente mesurado y modesto. Imágenes perfectamente montadas, que no deberían ser ni un centímetro más pequeñas”.
Sobre Miniaturas y panorama se explica: “en su parte interior las secciones se separan con una cartulina que corresponde, en tonalidad, a la cartulina de la cubierta. Alternativamente, el texto está impreso o estampado en relieve en planos intermedios. Mezcla de papel seleccionada magníficamente”.
Estos y otros libros más constituyen la muestra bibliográfica. Los libros alemanes más bellos colección 2006, que reabrirá el 7 de enero hasta el 8 de febrero en la Biblioteca de México.
Como parte de la promoción y difusión, tanto la Feria del Libro de Francfort como los Institutos Goethe de distintas partes del mundo, organizan una exhibición similar en distintos países; luego dotarán a los recintos que alojen la muestra de una colección, como ocurrirá en esta ocasión en la Biblioteca de México, la cual podrá ser consultada en su Fondo Reservado.
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