César Gaytán
20 mayo 2012
Los accidentes que se presentan en las minas de carbón en el estado de Coahuila son verdaderos crímenes, expresó el obispo de Saltillo, fray Raúl Vera López
Esto, luego que se diera a conocer el pasado viernes cerca de la media noche, sobre dos mineros que quedaron atrapados en un pocito de carbón de 45 metros de profundidad, tras haberse inundado.
“No están haciendo lo que se debe. La impunidad de los crímenes que ahí se cometen, porque son verdaderos crímenes, ahí queda”, dijo el jerarca eclesiástico.
Recordó lo sucedido en Pasta de Conchos, donde dijo que las autoridades protegieron el caso para que no se supiera la verdad, pues de haber llegado a los cuerpos se hubiera sabido si fue negligencia o no.
“Hay que ver en qué condiciones estaba funcionando la mina. Los pocitos son verdaderas trampas mortales que deben desaparecer porque no cumplen con la mínima regulación. Ya no estamos en el Siglo 19”, anotó.
Además, consideró que el hecho de que las mismas personas hablen sobre la infiltración de bandas criminales en la actividad minera, e incluso en zonas habitacionales, es una voz clara de la realidad de un Gobierno Federal que no ha podido dar solución al combate al narcotráfico.
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