En el cierre de su gira nacional, López Obrador destacó la importancia de las elecciones en el estado de México, donde “se está viviendo el primer episodio de la historia que tendrá su momento definitorio en julio del 2012”.
Alma E. Muñoz y Ciro Pérez
Publicado: 05/06/2011 14:03
México, DF. Andrés Manuel López Obrador convocó a la construcción de un nuevo pacto social “para lograr la hazaña de salvar a México”.
En este marco, destacó que son importantes las elecciones del estado de México, donde “se está viviendo el primer episodio de la historia que tendrá su momento definitorio en julio del 2012”.
Desde el zócalo capitalino, donde realizó el cierre de su gira nacional Salvemos a México, López Obrador pidió el apoyo para el candidato de la coalición Unidos Podemos Más, Alejandro Encinas, quien aseguró podría mejorar las condiciones de vida y del trabajo de los mexiquenses.
“Tengamos presente que en el estado de México mal gobiernan Enrique Peña Nieto, el candidato de la mafia del poder para el 2012, y como lo estamos viendo, están utilizando todo el dinero y los medios de comunicación para ganar a como dé lugar, sin escrúpulos morales de ninguna índole”.
Las cosas están bastante claras, sostuvo. “Que nadie diga que no se sabe hacia dónde vamos, que nadie diga que no tiene tareas en esta lucha para transformar a México, todos podemos ayudar a orientar, convencer y organizar al pueblo”.
López Obrador invitó a todos los mexicanos a construir el nuevo pacto social, poniendo como eje el proyecto alternativo de nación que hace poco presentó, y donde se plantea, en esencia, un cambio en la política económica.
Reiteró que un grupo de empresarios mantienen bajo su dominio al PRI y al PAN, y los usan como les conviene para mantener dominado al pueblo. Por eso, en las elecciones “ni PRI ni PAN, no más engaños, no más injusticias, no más corrupción, no más saqueo, no más sufrimiento para nuestro pueblo. Vamos por un camino del todo nuevo”.
Después de saludar la caravana que encabeza el poeta Javier Sicilia a Ciudad Juárez, López Obrador se definió como un hombre de fe y convicciones, con errores y defectos.
“En lo espiritual profeso el amor al prójimo, pero también y con la misma devoción, respeto a quienes mantienen otras creencias y a los libres pensadores. Nunca me ha interesado el dinero, pero sostengo que no todo el que tiene es malvado.
“Creo en la no violencia, en la libertad y en la tolerancia. Creo que el pueblo es dueño y constructor de su propio destino. Y estoy convencido que por el bien de todos, primero los pobres.
“No lucho por la ambición al poder, sino por ideales y principios, y estoy conciente que la transformación de México no depende de un solo hombre, sino de la participación de mujeres y hombres que han decidido tomar el destino del país en sus manos”.
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