Domingo, 17/02/2013 9:32
El crimen organizado inclinó la balanza al punto que es preferible correr el riesgo intentando hacer algo, afirma el operador de “Valor por Tamaulipas”
Los medios de comunicación tradicionales no tienen las condiciones para difundir la información sobre la violencia en el país, por eso la ciudadanía comenzó a utilizar Facebook y Twitter, establece el operador de “Valor por Tamaulipas”, por cuya identidad un grupo criminal ofrece 600 mil pesos.
Desde febrero de 2012 ambas plataformas de redes sociales comenzaron a cubrir un flanco abandonado por los medios en Tamaulipas.
“Las condiciones de nuestro país no permiten que los medios tradicionales puedan ejercer su trabajo sin poner en riesgo a sus integrantes. Además que en nuestro estado se presentan los casos de periodistas que deciden colaborar con el crimen organizado si éste les presenta la opción”, respondió vía Fecebook a un cuestionario de EL UNIVERSAL.
“La información es el trabajo conjunto de muchas personas, representa una alternativa a lo que los medios tradicionales no informan”.
—¿Cómo te allegas de información?
—Colaboración ciudadana. El tiempo es el mejor mecanismo de comprobación de hechos y la colaboración de algunos usuarios. Probablemente también la transparencia con la que se manejan los avisos. Algunos terminan siendo falsos, pero los toleramos, pues su porcentaje es bajo.
—¿Cómo nació esta idea?
—Las redes sociales ya estaban actuando en la prevención de situaciones de riesgo. Me sumé.
—¿Difundirías en la red tu verdadera identidad?
—Por ahora, no es algo que pueda considerar.
— ¿Cuántas veces has recibido amenazas?
—Amenazas se reciben siempre. Dos han sido considerables, cuando el Cártel del Golfo creó la página de “Antivalor por Tamaulipas” y en esta ocasión.
—Has hablado del miedo y de que no se puede tener más miedo, ¿cómo lo manejas?
—Es algo en lo que sigo trabajando. El temor siempre está y el manejar una página como esta lo convierte a uno en objetivo directo. Los ciudadanos tenemos que evaluar el miedo de ser afectados por el crimen, si hacemos algo que les moleste y el miedo a ser afectados si no hacemos nada. El crimen organizado inclinó la balanza al punto que es preferible correr el riesgo intentando hacer algo. O como dice una tuitera de Nuevo León que promueve el respeto a los criminales para no ser una estadística más.
—¿Cuáles son las principales dificultades para difundir la información?
—El miedo. No es bien visto por los criminales que difundamos avisos de situaciones de riesgo e intimidan a la población.
—¿Confías en el gobierno estatal y en el federal?
—No confío en el gobierno estatal porque se rige por los intereses de los criminales. Hay gente honesta y de buen corazón, pero llegaron a un punto en el que es elegir su vida o seguir las instrucciones que les dictan los criminales. No tengo elementos para creer que el gobierno federal pueda actuar con imparcialidad en mi estado.
—¿Qué le pedirías al gobierno federal?
—Que su lealtad sea para con el pueblo.
—Hay quien sostiene que en realidad “Valor por Tamaulipas” pertenece a inteligencia militar...
—Si eso piensa es mejor que se mantenga de esa forma. No lo niego ni lo afirmo. Deberá de comprender que en estos momentos todo lo que diga que especifique algo sobre mi persona, le dará datos a quien pueda buscarme. La página fue creada para la ciudadanía de bien del estado, y la ciudadanía es quien le alimenta. Las publicaciones son transparentes.
—¿Qué te dice tu familia sobre lo que haces?
—Que les he puesto en mucho riesgo y son conscientes de esa situación.
—¿Hasta cuándo o en qué momento estarías en disposición de difundir en redes?
—No creo poder continuar en redes, ni siquiera sé si eso funcione para que dejen de buscarme, puesto que las redes seguirán funcionando por más personas que asesinen. Los ciudadanos tenemos que intentar hacer algo con los medios que tenemos para recuperar la libertad.
—¿De quién sospechas que parten las amenazas?
—Todos los grupos pertenecientes al crimen organizado en algún momento han hecho algún comentario, el mismo gobierno del estado impide que fluya la información. Al ser Ciudad Victoria controlada por Los Zetas, sólo pienso en la opción de zetas o autoridades estatales corrompidas.
El Universal
17/02/2013
El administrador de la página explicó que la información es el trabajo de muchos, es una alternativa a lo que los medios no dicen. (Foto: EL UNIVERSAL)
Desde febrero de 2012 ambas plataformas de redes sociales comenzaron a cubrir un flanco abandonado por los medios en Tamaulipas.
“Las condiciones de nuestro país no permiten que los medios tradicionales puedan ejercer su trabajo sin poner en riesgo a sus integrantes. Además que en nuestro estado se presentan los casos de periodistas que deciden colaborar con el crimen organizado si éste les presenta la opción”, respondió vía Fecebook a un cuestionario de EL UNIVERSAL.
“La información es el trabajo conjunto de muchas personas, representa una alternativa a lo que los medios tradicionales no informan”.
—¿Cómo te allegas de información?
—Colaboración ciudadana. El tiempo es el mejor mecanismo de comprobación de hechos y la colaboración de algunos usuarios. Probablemente también la transparencia con la que se manejan los avisos. Algunos terminan siendo falsos, pero los toleramos, pues su porcentaje es bajo.
—¿Cómo nació esta idea?
—Las redes sociales ya estaban actuando en la prevención de situaciones de riesgo. Me sumé.
—¿Difundirías en la red tu verdadera identidad?
—Por ahora, no es algo que pueda considerar.
— ¿Cuántas veces has recibido amenazas?
—Amenazas se reciben siempre. Dos han sido considerables, cuando el Cártel del Golfo creó la página de “Antivalor por Tamaulipas” y en esta ocasión.
—Has hablado del miedo y de que no se puede tener más miedo, ¿cómo lo manejas?
—Es algo en lo que sigo trabajando. El temor siempre está y el manejar una página como esta lo convierte a uno en objetivo directo. Los ciudadanos tenemos que evaluar el miedo de ser afectados por el crimen, si hacemos algo que les moleste y el miedo a ser afectados si no hacemos nada. El crimen organizado inclinó la balanza al punto que es preferible correr el riesgo intentando hacer algo. O como dice una tuitera de Nuevo León que promueve el respeto a los criminales para no ser una estadística más.
—¿Cuáles son las principales dificultades para difundir la información?
—El miedo. No es bien visto por los criminales que difundamos avisos de situaciones de riesgo e intimidan a la población.
—¿Confías en el gobierno estatal y en el federal?
—No confío en el gobierno estatal porque se rige por los intereses de los criminales. Hay gente honesta y de buen corazón, pero llegaron a un punto en el que es elegir su vida o seguir las instrucciones que les dictan los criminales. No tengo elementos para creer que el gobierno federal pueda actuar con imparcialidad en mi estado.
—¿Qué le pedirías al gobierno federal?
—Que su lealtad sea para con el pueblo.
—Hay quien sostiene que en realidad “Valor por Tamaulipas” pertenece a inteligencia militar...
—Si eso piensa es mejor que se mantenga de esa forma. No lo niego ni lo afirmo. Deberá de comprender que en estos momentos todo lo que diga que especifique algo sobre mi persona, le dará datos a quien pueda buscarme. La página fue creada para la ciudadanía de bien del estado, y la ciudadanía es quien le alimenta. Las publicaciones son transparentes.
—¿Qué te dice tu familia sobre lo que haces?
—Que les he puesto en mucho riesgo y son conscientes de esa situación.
—¿Hasta cuándo o en qué momento estarías en disposición de difundir en redes?
—No creo poder continuar en redes, ni siquiera sé si eso funcione para que dejen de buscarme, puesto que las redes seguirán funcionando por más personas que asesinen. Los ciudadanos tenemos que intentar hacer algo con los medios que tenemos para recuperar la libertad.
—¿De quién sospechas que parten las amenazas?
—Todos los grupos pertenecientes al crimen organizado en algún momento han hecho algún comentario, el mismo gobierno del estado impide que fluya la información. Al ser Ciudad Victoria controlada por Los Zetas, sólo pienso en la opción de zetas o autoridades estatales corrompidas.
El Universal
17/02/2013
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