■ La economía nacional será la de menor crecimiento en la región, advierte
Roberto González Amador
Roberto González Amador
Por lo menos 380 mil personas que hoy tienen trabajo en la economía formal en México perderán su empleo en el transcurso del próximo año, en el contexto de una crisis de la actividad productiva que se sentirá con mayor intensidad en el primer semestre, estimó la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal).
“La crisis internacional está afectando por varios canales, es como si esto fuera un avión en donde se han apagado los motores del crecimiento”, comentó este jueves Alicia Bárcena, secretaria ejecutiva de la Cepal, al presentar el Balance preliminar de las economías de América Latina y el Caribe 2008.
El informe confirma que en 2009 México será una de las economías de menor crecimiento en la región, con un aumento estimado en apenas 0.5 por ciento. Ya en 2008, México cayó al penúltimo lugar regional en materia de aumento del producto interno bruto (PIB), con 1.8 por ciento, sólo arriba de Haití, que repuntará este año 1.5 por ciento, según los datos del organismo regional de las Naciones Unidas.
“Lo más preocupante de 2009 va a ser la pérdida de empleo”, expresó Barcena, al referirse a la región en conjunto. En América Latina y el Caribe, los cálculos del organismo apuntan a una pérdida de un millón 800 mil empleos formales. “No hay duda de que la ocupación va a disminuir”, aseguró.
En específico para México, la Cepal consideró que el desempleo en el medio urbano subirá de 4.9 a 5.7 por ciento de la población económicamente activa en 2009. En números absolutos, detalló Jorge Mattar, responsable de la oficina del organismo en el país, esto significa que el próximo año perderán su puesto de trabajo 380 mil personas que hoy están en la economía formal.
Los números aportados por el organismo apuntan a que, el próximo año, por cada 100 empleos formales que se pierdan en América Latina y el Caribe, 21 corresponderán a México.
“Va a haber problemas serios”, consideró Bárcena, al referirse a la expectativa económica para México en 2009. “Lo importante será proteger el gasto público, tratar de crear programas de empleo, incluso temporal”, añadió. Comentó que las medidas anunciadas por el gobierno federal de aumentar el gasto de infraestructura para tratar de contrarrestar la caída en la actividad económica y el empleo “van por el camino correcto pero habrá muchas otras cosas que se tendrán que pensar en el futuro próximo”.
En 2009, menciona el Balance preliminar de las economías de América Latina y el Caribe 2008, la economía mexicana sufrirá una nueva desaceleración, aunque las medidas gubernamentales para atemperar el impacto financiero y en el sector real contribuirán a proveer liquidez a la economía y estimular la actividad productiva.
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