domingo, 29 de septiembre de 2013

Relata el filme "El paciente interno" el atentado fallido de Carlos Castañeda

 


El documental llegará a las salas el 4 de octubre próximo. La idea de hacer este documental surgió en 2004, luego de leer un artículo por el periodista de La Jornada Gustavo Castillo García, señaló Alejandro Solar Luna.

Notimex
Publicado: 29/09/2013 17:26

México, DF. Carlos Castañeda de la Fuente intentó asesinar en 1970 al entonces presidente de México, Gustavo Díaz Ordaz, no lo consiguió y luego de ser recluido durante 23 años en un hospital psiquiátrico, ahora deambula por las calles de la ciudad sin rumbo fijo, esta es la historia que el cineasta Alejandro Solar Luna recuperó en su documental "El paciente interno".
"Lo que me llevó a contar esta historia fue que se trataba de un hecho insólito que vinculaba una etapa crucial para el país, como es el movimiento estudiantil de 1968, con un México contemporáneo con asignaturas pendientes", explicó Solar Luna en entrevista.
Comentó que Carlos Castañeda tomó la decisión de comprar una pistola con sus ahorros y el 5 de febrero de 1970 salir a buscar a Díaz Ordaz con la intención de matarlo, para vengar a los estudiantes muertos el 2 de octubre de 1968.
"Creo que es una historia que nos atañe a todos los mexicanos y es importante que las nuevas generaciones sepan lo que ocurrió, aunque mi documental no se centra en el movimiento estudiantil del 68, quise mostrar una de esas historias ocultas que fueron consecuencia de esos hechos", manifestó.
Recordó que la idea de hacer este documental surgió en 2004, luego de leer un artículo en el periódico escrito por el periodista Gustavo Castillo García que se titulaba: "Fallido agresor de Díaz Ordaz pasó 23 años en un psiquiátrico; Carlos Castañeda de la Fuente sufrió tortura; ahora pide limosna en la calle".
Fue así que Solar Luna empezó su investigación, "en ese momento yo no sabía si iba a encontrar a este personaje o si todavía estaba vivo, pero sabía que era importante contar su historia, algunos dicen que lo invoqué porque a los siete meses de iniciar la investigación lo encontré en la calle".
Pasaron varios días antes de que el documentalista se presentara ante don Carlos, "lo estuve siguiendo con mi camarógrafo, hasta que un día me decidí a abordarlo y platicarle mis intenciones de contar su historia, sin pensarlo demasiado, él aceptó".
Previo al encuentro, Alejandro Solar ya había iniciado su documental, con el apoyo de Gustavo Castillo, cuya investigación inspiró el proyecto, y la abogada Norma Ibáñez, quien liberó a don Carlos del hospital psiquiátrico "Samuel Ramírez Moreno", donde le hicieron un área especial para él solo, el Pabellón 6.
"El documental tomó otra dirección cuando encontramos a don Carlos porque yo lo conocía a través de la investigación, pero al tenerlo frente a mí contándome su propia historia con detalle y sin tapujos, me di cuenta de que él también deseaba que su historia fuera contada y el documental tomó otras dimensiones", apuntó.
A partir de ese momento, la tarea del director se enfocó en mostrar a su personaje principal con la misma potencia que su propia historia, "él confió en mí y yo me dejé llevar por él, así que en el documental es él mismo quien cuenta lo que pasó, historia que es validada con los testimonios de quienes lo conocieron en el albergue para indigentes".
Además de los testimonios, Solar Luna contactó a la periodista Gina Batista, que conducía un programa titulado "Realidades", ella tenía un video de don Carlos cuando estuvo recluido en el hospital psiquiátrico, así que todas las piezas estaban reunidas.
"Fue una suerte encontrar a Gina, quien con una cámara clandestina en formato VHS había filmado escenas del hospital psiquiátrico y cuyas imágenes se incluyen en el documental", indicó.
De acuerdo con la investigación realizada por Gustavo Castillo y como se ve en el documental "El paciente interno" cuando Carlos Castañeda de la Fuente tenía 29 años de edad, tomó la decisión de matar al entonces presidente de México Gustavo Díaz Ordaz, una vez que juntó el dinero necesario, compró una pistola Luger.
Carlos se enteró que el 5 de febrero el presidente haría un recorrido por el Monumento a la Revolución, así que ese día metió el arma en una pequeña maleta de plástico con la decisión de vengar a los muertos del movimiento de 1968 en la Ciudad de México, luego de que un amigo, católico, de la secundaria le regaló el libro "Héctor", de Jorge Gram, que hablaba del prototipo del joven cristero, expresó.
El único tiro que salió de su pistola Luger se incrustó en la carrocería del vehículo en el que viajaba el general Marcelino García Barragán, secretario de la Defensa Nacional y de inmediato fue detenido por elementos del Servicio Secreto y Guardias Presidenciales.
A partir de ese momento comenzó un verdadero infierno para Castañeda de la Fuente. "Un joven tranquilo, católico", que pensó: "detrás de cada movimiento hay un hombre dispuesto a dar la vida para influir en el movimiento" y también que "gastados todos los medios, se usan las armas", detalló Solar Luna.
Cuatro meses pasó detenido e incomunicado. Estuvo en las instalaciones de la DFS, en el Campo Militar Número Uno y en la estación migratoria de Iztapalapa. Y vendrían 23 años de reclusión en el hospital psiquiátrico situado en el kilómetro 5.5 de la autopista México-Puebla. En un juicio sumario lo declararon enfermo mental.
Después de 23 años Castañeda de la Fuente salió del hospital psiquiátrico y aunque tiene un hermano, tomó la decisión de vivir en las calles, por donde deambula todos los días.
Lo que pasó antes y después del atentado, fue documentado por el cineasta Alejandro Solar Luna en "El paciente interno", ópera prima del Centro Universitario de Estudios Cinematográficos (CUEC), que llegará a salas de cine comerciales el próximo 4 de octubre.

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