Vanguardia
22 Septiembre 2011
Saltillo.- Un niño encontró una granada en el fraccionamiento Agua Azul, con todo y espoleta, después del enfrentamiento del martes por la mañana, donde grupos pistoleros rivales se dieron con todo por más de tres horas.
Una vecina de la calle Fray Juan de Terreros contó que durante el enfrentamiento del lunes pasado estaba acompañada de su madre, quien tiene problemas de audición, y su hijo de ocho años.
Ese día ella estaba en el cuarto del pequeño, se habían quedado dormidos porque estaban viendo una película. Por la madrugada escuchó una discusión afuera de su casa, de pronto vinieron los disparos: el infierno, diría ella.
Después tomó al niño para protegerlo y despertó a su mamá, los tres se tiraron al suelo y a rastras se dirigieron a otra recámara. Cuando pudo recobrar la calma llamó a una de sus hermanas, quien escuchó los disparos a través del auricular.
Su hermana trató de tranquilizarla, reportó los hechos al Sistema Estatal de Emergencias, contaría: “Luego le volví a marcar, estaba desesperada, me decía que no dejaban de disparar; algunas balas entraron a la casa, las ventanas de las escaleras están todas quebradas, incluso hay un impacto en la recámara de mi sobrino, no quiero pensar lo que les pudo haber sucedido si se quedan ahí”, narra aún angustiada.
Al otro día, cuando cierta calma llegó a la colonia, los tres pudieron salir de casa. El niño se agachó y tomó algo del suelo: era un granada con todo y seguro. Temerosas, madre e hija, le pidieron que la dejara con cuidado en el suelo, pensaban, dijo la mamá del niño, que iba a explotar.
La Fiscalía General del Estado tomó conocimiento, recogiendo el explosivo horas después. La familia no ha regresado a su casa por temor, han tenido que mandar a familiares a arreglar detalles del seguro de su vehículo que quedó dañado tras el enfrentamiento.
Huyen por temor
Miguel, otro habitante del fraccionamiento Agua Azul, dice que no quiere saber nada de su casa; antes consideraba que estaba en un sector tranquilo y seguro, pero los sucesos de la madrugada del martes los marcaron para siempre.
“Esa noche, por fortuna salí temprano de trabajar, llegué a mi casa y me acosté, en el cuarto estábamos mi esposa y mi niña de un mes de nacida, a eso de las tres de la mañana escuchamos el tiroteo, me salí de la cama y me llevé a mi esposa y a mi hija a la cocina, ahí estuvimos durante toda la balacera”, dijo.
Sólo tienen un año de haberse cambiado al lugar que escogieron para formar una familia. Al otro día abandonaron la casa llevándose lo necesario para pasar ese día.
La tarde de ayer regresaron acompañados de un camión de mudanza para sacar sus muebles: “Siento una gran impotencia por no poder hacer nada, ese día me di cuenta que la vida de mi hija y de mi esposa estuvieron en un grave riesgo, me da miedo sólo de pensar en lo que pudo haber pasado, ahora tenemos que resignarnos y comenzar de nuevo en otra parte aunque creo que en Saltillo ya ningún lugar es seguro pero no puedo pasar por lo mismo otra vez”.
Estos son sólo dos testimonios de las personas que estuvieron en el momento de la balacera quienes, además de ser vecinos Leticia y Miguel, compartieron los momentos de terror que vivieron esa madrugada, incluso han batallado para dormir, tienen miedo de que por la noche se repita esa experiencia en la que su vida y la de sus familias estuvieron en grave peligro.
Inicia PGR investigación
La Procuraduría General de la República, a través del Fiscal del Ministerio Público de la Federación, inició la indagatoria AP/PGR/COAH/SALT-1/406/2011 contra quien o quienes resulten responsables de los delitos de violación a la Ley Federal de Armas de Fuego y Explosivos y daño en propiedad ajena.
De acuerdo con los hechos asentados en el expediente, en la calle de Juan Terreros del fraccionamiento Agua Azul, se suscitó un enfrentamiento entre dos grupos de personas armadas, quienes a bordo de diversos vehículos en movimiento realizaron disparos con arma de fuego.
Sobre la calle Juan Terreros casi esquina con bulevar Rafael González Cepeda se apreció un inmueble el cual presentaba múltiples daños en su fachada exterior, al parecer provocados por armas de fuego y granadas, localizándose en la parte exterior un vehículo marca Jeep Liberty, color gris, con placas de circulación de Texas, E.U.A, el cual presentaba daños en su totalidad, provocados por armas de fuego. Asimismo, se localizaron múltiples cartuchos percutidos de diferentes calibres.
En la calle Juan de Terreros, esquina con Humboldt, se aseguró un vehículo Escalade, color Beige, presuntamente participante en los hechos.
Cabe señalar que en el lugar se aseguraron tres granadas de fragmentación sin percutir.
Los vehículos y las granadas de fragmentación fueron puestos a disposición del representante Social de la Federación, quien inició la averiguación previa correspondiente en lo referente a su competencia.
Terror
Fue la madrugada del pasado martes cuando se suscitó una balacera.
El lugar fue la calle Juan Terreros del fraccionamiento Agua Azul.
Una vivienda ubicada en la calle Juan Terreros casi esquina con el bulevar Rafael González, fue el blanco del ataque.
El lugar fue atacado, además de a balazos, presuntamente con granadas.
En la calle fueron halladas tres granadas de que no estallaron.
Un vehículo marca Cadillac tipo Escalade fue asegurado.
Al día siguiente en la casa baleada fueron halladas tres personas presuntamente secuestradas.
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