El candidato del Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA) a la presidencia municipal de Ciudad Lerdo, Durango, Ulises Adame de León, un chapulín partidista que huyó del PRI-cuando sus padrinos políticos perdieron el poder y fue rechazado por los priistas municipales-, para convertirse en candidato independiente a la alcaldía en el año 2016; ahora, beatificado con solo declarar que está inmerso en la Cuarta Transformación y sus principios de no mentir, no robar, no traicionar, Adame de León, se apresta a ganar la presidencia como candidato externo de MORENA, desplazando de esa aspiración a los formadores de esa organización partidista por una supuesta encuesta que ni el delegado estatal de ese partido en Durango, Armando Navarro Gutiérrez, supo explicar quien realizó ese sondeo.
Con muchas probabilidades de obtener el triunfo el próximo 2 de junio, el pueblo lerdense merece saber quién los quiere gobernar, porque el presente de las personas se forjó con acciones del pasado que ahora ningún candidato quisiera que se conocieran, más aún cuando se burló la ley usando la impunidad del poder, pero además, que Ulises Adame de León, nunca creó acciones gubernamentales que beneficiaran a los ciudadanos, pero particularmente a la clase campesina a la que dijo representar.
Publicado en la Revista Demócrata Norte de México, en su número 89 del 31 de agosto de 2003, se rescata este texto como un derecho de los ciudadanos a estar informados. (JML, mayo 16 de 2019).
Juan Monrreal López
Agosto 31 de 2003
Homicida, burlador de la ley por el poder gubernamental que detentaba, Fernando Ulises Adame de León, candidato priísta a la diputación federal por el distrito 03 del estado de Durango, es el vivo ejemplo de que para los tricolores, invariablemente primero son ellos, después ellos, siempre ellos…
Adame de León se convirtió en homicida bajo los influjos del alcohol, pues atropelló y mató al niño Francisco de León, de 11 años -hijo de su primo del mismo nombre- en San Juan de Guadalupe, hace tres años. Aún más, bajo los efectos etílicos y del poder, persiguió al menor y primo hermano de la víctima, testigo ocular del hecho, con la intención de dañarlo, según cuentan los vecinos.
Pero bajo la complicidad del gobernador Ángel Sergio Guerrero Mier, Adame de León se salvó de caer tras los barrotes penitenciarios; el caso está condenando al olvido en los archivos de la Agencia del Ministerio Público de Cuencamé, Durango.
Adame de León se convirtió en homicida bajo los influjos del alcohol, pues atropelló y mató al niño Francisco de León, de 11 años -hijo de su primo del mismo nombre- en San Juan de Guadalupe, hace tres años. Aún más, bajo los efectos etílicos y del poder, persiguió al menor y primo hermano de la víctima, testigo ocular del hecho, con la intención de dañarlo, según cuentan los vecinos.
Pero bajo la complicidad del gobernador Ángel Sergio Guerrero Mier, Adame de León se salvó de caer tras los barrotes penitenciarios; el caso está condenando al olvido en los archivos de la Agencia del Ministerio Público de Cuencamé, Durango.
Pese a su “gran” curricula como funcionario estatal, Ulises Adame de León dejó sumido en la quiebra total al campo duranguense, resultado contrario a la responsabilidad que tenía, siendo titular de la Secretaría de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural del estado de Durango; dependencia en la que ejerció el presupuesto con tintes clientelares y por ende, sin un plan de desarrollo integrador del campo.
Dos veces secretario de Desarrollo Rural, en este periodo de indolencia gubernamental de Guerrero Mier, Adame de León es diputado local con licencia, y ahora se apresta a ganar la diputación federal del distrito 03 que, aunque todavía no gana, le sirve ya para promoverse para la candidatura a la senaduría del año 2006.
Dos veces secretario de Desarrollo Rural, en este periodo de indolencia gubernamental de Guerrero Mier, Adame de León es diputado local con licencia, y ahora se apresta a ganar la diputación federal del distrito 03 que, aunque todavía no gana, le sirve ya para promoverse para la candidatura a la senaduría del año 2006.
Ciudad Lerdo, Durango. – Diputado local del estado de Durango por el distrito XII con asiento en esta localidad, Ulises Adame no tiene nada de que alardear. Avecindado en esta ciudad por órdenes del propio Guerrero Mier, burlador de la ley y del voto popular, fue incapaz de detener el éxodo del campo lerdense, primero como secretario del ramo y posteriormente como diputado local.
Sumidos en la miseria total, los campesinos de este municipio -por cierto, la ciudad más antigua de la Laguna- considerado el cuarto en importancia por el monto de su recaudación en el estado, ya expulsó al 60 por ciento de su población rural, según denunciaron los dirigentes cenecistas.
Siempre confundido por su ambición pública, Ulises Adame de León debe su inclusión política en el gabinete de Guerrero Mier a la recomendación directa de Eladio Ramírez López, dirigente nacional de la Confederación Nacional Campesina (CNC).
Ganadas las elecciones en el estado, allá por 1998 y después de pasar el tradicional besamanos de rendición de cuentas ante Ernesto Zedillo, Guerrero Mier aceptó a bordo del avión de retorno a la capital del estado la orden de Eladio Ramírez López, para incluir como secretario a este docente.
De hecho, la historia de Adame de León es apoderarse de los puestos de poder con todo el apoyo oficial, tal como se hizo de la dirección de la Universidad Autónoma Agraria Antonio Narro (UAAAN) desde la que sirvió al ahora dirigente nacional de la CNC, misma institución en la que estuvo cobrando como aviador, siendo secretario de Agricultura del estado de Durango.
Con el apoyo de Eladio Ramírez, saltar de puesto en puesto -siempre protegido por la red del presupuesto público- ha sido la mejor virtud de este candidato priísta a la diputación federal.
Con el apoyo de Eladio Ramírez, saltar de puesto en puesto -siempre protegido por la red del presupuesto público- ha sido la mejor virtud de este candidato priísta a la diputación federal.
1998, el despegue de Ulises
Ulises Adame no creía que su suerte fuera buena en La Laguna de Durango, por eso, en 1998 vivía en Torreón. De hecho, como director regional de la UAAAN sus actividades las centraba en Coahuila. Desde esta Universidad, solícito siempre, estuvo apegado a las órdenes que llegasen de la CNC, principalmente del ex gobernador de Oaxaca, Eladio Ramírez.
Su apuesta como la mayoría de los priístas y los políticos de los partidos, fue esperar a que la rueda de la fortuna lo colocara en lo que los políticos consideran lo “alto”.
Por eso aquella mañana de 1998 la suerte le sonrió desde el cielo, cuando en pleno vuelo le consiguieron el nombramiento de secretario de Agricultura, tuvo que mudarse con inmenso pesar a Ciudad Lerdo.
Establecido como neofuncionario, oriundo de San Juan de Guadalupe, Durango, Ulises Adame aprovechó el resquebrajamiento del grupo de los seguidores del ex dirigente nacional cenecista, Hugo Andrés Araujo. Con el camino despejado y mediante el uso del poder presupuestal, ganó adeptos en las direcciones de los comisariados ejidales y comités regionales campesinos de la CNC del distrito XII, que en este municipio tiene el mayor número de votantes.
Con la alcaldía lerdense en manos del panista Gerardo Katsicas, Ulises Adame vendió a Guerrero Mier la idea de recuperar el municipio junto con el distrito. La visión, por supuesto, centraba en su persona la candidatura a la diputación local.