Porcentaje de electores con intención de emitir su voto en blanco podría superar al de partidos que en 2008 perdieron sus prerrogativas en CoahuilaVioleta Rodríguez / José Reyes 23-Junio-2009 Vanguardia de Saltillo
La ciudadanía tiene derecho a manifestar sus preferencias políticas durante las elecciones del 5 de julio, por eso al Instituto Federal Electoral le preocupa más el abstencionismo que la emisión del voto blanco, dijo José Luis Vázquez López.
El vocal ejecutivo del IFE en Coahuila, manifestó ayer que, en ese sentido, el voto blanco es una expresión de ciudadanos que razonan su sufragio.
“Nos preocupa más el abstencionismo que el voto blanco”, dijo, “la preocupación está con los ciudadanos que no van (a las casillas) ni anulan, por aquellos que ni siquiera se van a parecer en la urna”.
Expuso que respeta la postura de aquellos electores que no han encontrado una opción entre los ocho partidos políticos que compiten y, por lo tanto, que ‘blanquearán’ su voto.
“Los ciudadanos tenemos derecho de manifestarnos”, reflexionó, “como institución no podemos desconocer que hay una corriente importante de ciudadanos que opinan que van a tener más impacto en la incidencia de los diferentes asuntos públicos manifestando su voto anulando”.
Explicó que el voto blanco representa a un grupo de personas que no se siente representado por las diferentes opciones que están participando.
“Nos parece bien, el voto blanco es un voto razonado. Si un ciudadano piensa que las opciones que hay el sistema electoral no le convencen y él va la urna para anular su voto, ese es su razonamiento”, comentó.
Vázquez López calificó esa postura como un nuevo fenómeno de la democracia y con ello prevé que el modelo se perfeccione.
En términos prácticos, recordó el funcionario electoral, no contará el voto, sin embargo para el IFE, con que el ciudadano llegue el 5 de julio y realice el ritual de los comicios, será suficiente y satisfactorio.
“Invitamos a que razonen su voto y voten por quien quieran y si no les gusta ninguno, entonces hagan lo que deban hacer con su boleta. Finalmente tienen derecho sobre su boleta en su calidad de ciudadanos. Si no hacen nada de esto ya no habrá democracia”.
VANGUARDIA publicó ayer una encuesta en la que el 23 por ciento de los electores saltillenses expresó que votará “en blanco” el 5 de julio para elegir diputados federales.
El ejercicio arrojó que los saltillenses con intención de sufragar entienden que el voto blanco es una forma de protestar por la inconformidad de la gente, un signo de la desconfianza y de la indecisión por las opciones que actualmente presentan los partidos.
Según las cifras del sondeo, si el 40 por ciento del padrón electoral de Saltillo sufragara el 5 de julio, ese 23 por ciento de voto blanco que arrojan las proyecciones estadísticas podría representar más del 9 por ciento de los sufragios, lo cual no es poca cosa.
Dicho porcentaje es muy superior al que en conjunto “eliminó” a cinco partidos políticos en las elecciones locales del 19 de octubre del año pasado.
Partidos nacionales como el PT, Partido Verde, Convergencia y Nueva Alianza perdieron en 2008 sus prerrogativas y su derecho a participar en futuros comicios por no haber logrado el 3 por ciento de la votación.
Por su parte, el Partido Cardenista, además de haber perdido todo lo anterior, también vio desaparecer su registro como organismo político, por ser una institución únicamente estatal.
En conjunto, los cinco institutos políticos necesitaron el 7.71 por ciento de la votación para haber sobrevivido, porcentaje que palidece frente al 23 por ciento de voto blanco que se cierne sobre las urnas el primer domingo de julio.
En dichas elecciones el PT obtuvo 12 mil 216 votos (1.74 por ciento); el Verde, 13 mil 752 (1.96 por ciento); Convergencia, 3 mil 275 (0.47 por ciento); el Cardenista, 9 mil 742 (1.39 por ciento), y Nueva Alianza registró 12 mil 377 votos (1.76 por ciento).
Dichos partidos perderán de manera global cerca de 11.5 millones de pesos para el próximo año, luego de que el IEPC les canceló el registro.
La ciudadanía tiene derecho a manifestar sus preferencias políticas durante las elecciones del 5 de julio, por eso al Instituto Federal Electoral le preocupa más el abstencionismo que la emisión del voto blanco, dijo José Luis Vázquez López.
El vocal ejecutivo del IFE en Coahuila, manifestó ayer que, en ese sentido, el voto blanco es una expresión de ciudadanos que razonan su sufragio.
“Nos preocupa más el abstencionismo que el voto blanco”, dijo, “la preocupación está con los ciudadanos que no van (a las casillas) ni anulan, por aquellos que ni siquiera se van a parecer en la urna”.
Expuso que respeta la postura de aquellos electores que no han encontrado una opción entre los ocho partidos políticos que compiten y, por lo tanto, que ‘blanquearán’ su voto.
“Los ciudadanos tenemos derecho de manifestarnos”, reflexionó, “como institución no podemos desconocer que hay una corriente importante de ciudadanos que opinan que van a tener más impacto en la incidencia de los diferentes asuntos públicos manifestando su voto anulando”.
Explicó que el voto blanco representa a un grupo de personas que no se siente representado por las diferentes opciones que están participando.
“Nos parece bien, el voto blanco es un voto razonado. Si un ciudadano piensa que las opciones que hay el sistema electoral no le convencen y él va la urna para anular su voto, ese es su razonamiento”, comentó.
Vázquez López calificó esa postura como un nuevo fenómeno de la democracia y con ello prevé que el modelo se perfeccione.
En términos prácticos, recordó el funcionario electoral, no contará el voto, sin embargo para el IFE, con que el ciudadano llegue el 5 de julio y realice el ritual de los comicios, será suficiente y satisfactorio.
“Invitamos a que razonen su voto y voten por quien quieran y si no les gusta ninguno, entonces hagan lo que deban hacer con su boleta. Finalmente tienen derecho sobre su boleta en su calidad de ciudadanos. Si no hacen nada de esto ya no habrá democracia”.
VANGUARDIA publicó ayer una encuesta en la que el 23 por ciento de los electores saltillenses expresó que votará “en blanco” el 5 de julio para elegir diputados federales.
El ejercicio arrojó que los saltillenses con intención de sufragar entienden que el voto blanco es una forma de protestar por la inconformidad de la gente, un signo de la desconfianza y de la indecisión por las opciones que actualmente presentan los partidos.
Según las cifras del sondeo, si el 40 por ciento del padrón electoral de Saltillo sufragara el 5 de julio, ese 23 por ciento de voto blanco que arrojan las proyecciones estadísticas podría representar más del 9 por ciento de los sufragios, lo cual no es poca cosa.
Dicho porcentaje es muy superior al que en conjunto “eliminó” a cinco partidos políticos en las elecciones locales del 19 de octubre del año pasado.
Partidos nacionales como el PT, Partido Verde, Convergencia y Nueva Alianza perdieron en 2008 sus prerrogativas y su derecho a participar en futuros comicios por no haber logrado el 3 por ciento de la votación.
Por su parte, el Partido Cardenista, además de haber perdido todo lo anterior, también vio desaparecer su registro como organismo político, por ser una institución únicamente estatal.
En conjunto, los cinco institutos políticos necesitaron el 7.71 por ciento de la votación para haber sobrevivido, porcentaje que palidece frente al 23 por ciento de voto blanco que se cierne sobre las urnas el primer domingo de julio.
En dichas elecciones el PT obtuvo 12 mil 216 votos (1.74 por ciento); el Verde, 13 mil 752 (1.96 por ciento); Convergencia, 3 mil 275 (0.47 por ciento); el Cardenista, 9 mil 742 (1.39 por ciento), y Nueva Alianza registró 12 mil 377 votos (1.76 por ciento).
Dichos partidos perderán de manera global cerca de 11.5 millones de pesos para el próximo año, luego de que el IEPC les canceló el registro.
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