El Sistema Nacional, revela que es uno de los estados con menos avances por la falta de recursos propios y proyectos específicos
miércoles, 03 de abril de 2013
A pesar que los esfuerzos del Gobierno de Coahuila se han enfocado en la presente administración estatal para mejorar los niveles de seguridad en la población, sobre todo en zonas de alta incidencia delictiva como la Región Laguna, los recursos para el área de seguridad no llegan a la entidad como se esperaba, e incluso algunos se han dejado de ejercer por falta de proyectos.
De acuerdo con las asignaciones que realiza la Secretaría de Seguridad Pública a nivel federal, todos los estados del país pueden acceder a tres ramos principales: Fondo de Aportaciones para la Seguridad Pública (FASP); Programa de Apoyo a la Seguridad Pública (Proasp), y por último el Subsidio para la Policía Acreditable (SPA), sin embargo, en Coahuila algunos rubros han sufrido aportaciones mínimas en los últimos tres años, ubicándose como la entidad con menores avances de acuerdo con informes al cierre de 2012.
APORTACIONES TARDÍAS
Aunque uno de los fondos más fáciles para obtener recursos es el Fondo de Aportaciones para la Seguridad Pública (FASP), en el que solamente se tiene como requisito que enviar al Sistema Nacional de Seguridad Pública Nacional datos como el número de elementos en activo y la incidencia delictiva en secuestros y muertes violentas, Coahuila no logró presentar avances en el ejercicio de sus recursos durante 2011, pero el año pasado fue uno de los últimos estados en obtener el recurso casi al cierre del año.
La falta de cobertura de las ministraciones estatales se ha reflejado en la entrega de patrullas a destiempo, de armamento insuficiente y de un retraso en equipamiento de unidades con equipos de radiocomunicación, además de rotulación como se pide estandarizarlo a nivel nacional.
Ante la falta de recursos estatales, el fondo para 2012 estuvo a punto de regresarse a la Federación.
POCO SE DESTINA A LA PREVENCIÓN
El Programa de Apoyo a la Seguridad Pública, para el cual se destinó en 2012 un presupuesto a Coahuila de 30 millones de pesos, tiene apenas un avance del 12 por ciento en la asignación, toda vez que apenas se ha entregado a la entidad 4 por ciento de los recursos, mientras otros estados han logrado ministraciones al cien por ciento.
Datos del Sistema Nacional de Seguridad Pública señalan que en la entidad se cumplen los lineamientos, pero no en los tiempos que marca el cambio para la unificación que busca la Secretaría de Seguridad Pública a nivel nacional.
El problema para la asignación completa del Proasp se debe a que el titular del Centro Estatal de Prevención del Delito, Pedro Ramírez Barbosa, no entregó los programas de prevención del delito con ejes rectores, prioridades y calendarización desde el año pasado, fecha en la que se debió entregar el proyecto para que recibiera Coahuila recursos en el primer trimestre de este año.
Trascendió que un despacho externo contratado por la Secretaría de Seguridad Pública, es el encargado de hacer los programas que se presentan a nivel nacional en el caso de Coahuila, pero tampoco se ha dado cumplimiento como se esperaba, por lo cual más de 26 millones de pesos siguen en espera de ser entregados a la entidad para los programas de prevención del delito.
Oficinas de aparador
Tal y como lo ordena el Sistema Nacional de Seguridad Pública, cada entidad debe tener una Unidad de Inteligencia Delictiva en el área de procuración de justicia, lo cual se cumple en Coahuila desde hace poco más de un año y está a cargo de Patricia Cepeda.
Sin embargo, es de interés nacional que cada dependencia de seguridad en las áreas de procuración de justicia y de seguridad pública tengan por separado unidades de inteligencia financiera, en la que deben de intervenir otras dependencias estatales como la Secretaría de Finanzas y otros organismos de fiscalización financiera.
Esta última dependencia fue reportada como creada ante el Sistema Nacional de Seguridad Pública, la cual aparentemente está a cargo de José Luis Muñoz Buentello, pero únicamente opera como administración interna de la Procuraduría de Justicia y no como lo que presuntamente deben atender sus funciones.
Fuente: http://www.secretariadoejecutivosnsp.gob.mx/en/SecretariadoEjecutivo/
¿Qué recursos se logran con cada programa?
1.- Fondo de Aportaciones para la Seguridad Pública (FASP):
Son recursos de fácil captación para la adquisición de patrullas, armamento y aditamentos como equipos de radiocomunicación
2.- Programa de Apoyo a la Seguridad Pública (PROASP):
Este programa permite a las entidades federales atender los proyectos presentados en materia de capacitación, entrenamiento, prevención del delito e infraestructura secundaria como patios de pruebas, centros de entrenamiento, aulas, entre otros. Para allegarse de recursos es necesario presentar proyectos con ejes rectores, prioridades y calendarización de aplicación de recursos.
3.- Subsidio para la Policía Acreditable (SPA):
Este tipo de recursos se utilizan para la aplicación de pruebas de control y confianza, reclutamiento de personal, examen psicométrico, estudio de entorno social y aplicación de pruebas de confiabilidad con polígrafos.
En la Policía Acreditable el mayor de los retrasos
En torno al cumplimiento de los lineamientos establecidos para la capacitación y creación de la policía de élite, es decir, la acreditable y confiable para la población, Coahuila se ubica como el segundo estado con menor cumplimiento a nivel nacional, de acuerdo con los propios resultados publicados al cierre de 2012 en la página oficial del Sistema Nacional de Seguridad Pública.
En el proceso de convocatoria y reclutamiento, Coahuila presenta un avance del 0%, es decir, prácticamente el proceso de selección de nuevos elementos está detenido en la administración.
En los tres rubros de equipamiento, tanto para el personal policiaco, como de equipamiento de redes y tecnología que requiere el Sistema Nacional de Seguridad Pública para la transferencia de información confidencial de datos personales, no se reporta avance de la entidad.
De acuerdo con los resultados nacionales, Coahuila se planteó hace 3 años una meta de 422 elementos acreditables en la primera fase, pero a la fecha, en cinco generaciones, apenas se han logrado poco menos de 200, por ello en la entidad se trata de impulsar el programa denominado Coahuila necesita 300 héroes, sin embargo, la convocatoria tiene resultados muy lentos, lo que hace que cada vez más policías sean despedidos por no pasar las pruebas de control, mientras la contratación de nuevos elementos avanza a un ritmo casi cinco veces menor a lo esperado.
¿A QUIÉN CREERLE?
Mientras el decretario de Seguridad Pública en la entidad, Gerardo Villarreal Ríos, asegura que todos los elementos ya pasaron las pruebas de control y confianza, y advierte que Coahuila ya va en la quinta generación de policías acreditables, la información oficial señala que Coahuila tiene apenas el 12.8 por ciento de la formación del personal y el 7% de la implementación de los sistemas para realizar las pruebas de control al personal.
Hasta el momento, se han invertido cerca de 70 millones de pesos en la acreditación de personal capacitado, mientras que la bolsa para Coahuila es de 200 millones de pesos, pero continúa sin ejercerse por los retrasos en la aplicación de los programas.
Pirateo de policías
Uno de los rubros que obran en contra de los esfuerzos de Coahuila, obedecen principalmente al pago de los servicios de seguridad que se destinan para cada elemento, quienes tienen durante la capacitación una beca mensual de 5 mil pesos y un pago promedio de 16 mil pesos mensuales, mientras en estados como Nuevo León, la capacitación es sinónimo de un pago de 8 mil pesos mensuales de beca, y un pago que va desde los 19 a los 22 mil pesos para cada elemento formado bajo los lineamientos de la Policía Acreditable.
En la entidad se tiene al menos el registro de 30 elementos que han solicitado su cambio a Nuevo León, e incluso a la propia Policía Municipal de Saltillo debido a salarios más competitivos.
Desde hace meses, las campañas de búsqueda de elementos nuevos para Nuevo León se desarrolla en centros comerciales de Coahuila y lugares de mucha afluencia de población.
Mientras que Coahuila capacita y certifica a los policías, basta que los estados vecinos publiquen su tabulador salarial para que los elementos preparados pidan su cambio, lo que también advierte una falta de compromiso de los elementos policiacos para atender los problemas de seguridad en la entidad.
De acuerdo con las asignaciones que realiza la Secretaría de Seguridad Pública a nivel federal, todos los estados del país pueden acceder a tres ramos principales: Fondo de Aportaciones para la Seguridad Pública (FASP); Programa de Apoyo a la Seguridad Pública (Proasp), y por último el Subsidio para la Policía Acreditable (SPA), sin embargo, en Coahuila algunos rubros han sufrido aportaciones mínimas en los últimos tres años, ubicándose como la entidad con menores avances de acuerdo con informes al cierre de 2012.
APORTACIONES TARDÍAS
Aunque uno de los fondos más fáciles para obtener recursos es el Fondo de Aportaciones para la Seguridad Pública (FASP), en el que solamente se tiene como requisito que enviar al Sistema Nacional de Seguridad Pública Nacional datos como el número de elementos en activo y la incidencia delictiva en secuestros y muertes violentas, Coahuila no logró presentar avances en el ejercicio de sus recursos durante 2011, pero el año pasado fue uno de los últimos estados en obtener el recurso casi al cierre del año.
La falta de cobertura de las ministraciones estatales se ha reflejado en la entrega de patrullas a destiempo, de armamento insuficiente y de un retraso en equipamiento de unidades con equipos de radiocomunicación, además de rotulación como se pide estandarizarlo a nivel nacional.
Ante la falta de recursos estatales, el fondo para 2012 estuvo a punto de regresarse a la Federación.
POCO SE DESTINA A LA PREVENCIÓN
El Programa de Apoyo a la Seguridad Pública, para el cual se destinó en 2012 un presupuesto a Coahuila de 30 millones de pesos, tiene apenas un avance del 12 por ciento en la asignación, toda vez que apenas se ha entregado a la entidad 4 por ciento de los recursos, mientras otros estados han logrado ministraciones al cien por ciento.
Datos del Sistema Nacional de Seguridad Pública señalan que en la entidad se cumplen los lineamientos, pero no en los tiempos que marca el cambio para la unificación que busca la Secretaría de Seguridad Pública a nivel nacional.
El problema para la asignación completa del Proasp se debe a que el titular del Centro Estatal de Prevención del Delito, Pedro Ramírez Barbosa, no entregó los programas de prevención del delito con ejes rectores, prioridades y calendarización desde el año pasado, fecha en la que se debió entregar el proyecto para que recibiera Coahuila recursos en el primer trimestre de este año.
Trascendió que un despacho externo contratado por la Secretaría de Seguridad Pública, es el encargado de hacer los programas que se presentan a nivel nacional en el caso de Coahuila, pero tampoco se ha dado cumplimiento como se esperaba, por lo cual más de 26 millones de pesos siguen en espera de ser entregados a la entidad para los programas de prevención del delito.
Oficinas de aparador
Tal y como lo ordena el Sistema Nacional de Seguridad Pública, cada entidad debe tener una Unidad de Inteligencia Delictiva en el área de procuración de justicia, lo cual se cumple en Coahuila desde hace poco más de un año y está a cargo de Patricia Cepeda.
Sin embargo, es de interés nacional que cada dependencia de seguridad en las áreas de procuración de justicia y de seguridad pública tengan por separado unidades de inteligencia financiera, en la que deben de intervenir otras dependencias estatales como la Secretaría de Finanzas y otros organismos de fiscalización financiera.
Esta última dependencia fue reportada como creada ante el Sistema Nacional de Seguridad Pública, la cual aparentemente está a cargo de José Luis Muñoz Buentello, pero únicamente opera como administración interna de la Procuraduría de Justicia y no como lo que presuntamente deben atender sus funciones.
Fuente: http://www.secretariadoejecutivosnsp.gob.mx/en/SecretariadoEjecutivo/
¿Qué recursos se logran con cada programa?
1.- Fondo de Aportaciones para la Seguridad Pública (FASP):
Son recursos de fácil captación para la adquisición de patrullas, armamento y aditamentos como equipos de radiocomunicación
2.- Programa de Apoyo a la Seguridad Pública (PROASP):
Este programa permite a las entidades federales atender los proyectos presentados en materia de capacitación, entrenamiento, prevención del delito e infraestructura secundaria como patios de pruebas, centros de entrenamiento, aulas, entre otros. Para allegarse de recursos es necesario presentar proyectos con ejes rectores, prioridades y calendarización de aplicación de recursos.
3.- Subsidio para la Policía Acreditable (SPA):
Este tipo de recursos se utilizan para la aplicación de pruebas de control y confianza, reclutamiento de personal, examen psicométrico, estudio de entorno social y aplicación de pruebas de confiabilidad con polígrafos.
En la Policía Acreditable el mayor de los retrasos
En torno al cumplimiento de los lineamientos establecidos para la capacitación y creación de la policía de élite, es decir, la acreditable y confiable para la población, Coahuila se ubica como el segundo estado con menor cumplimiento a nivel nacional, de acuerdo con los propios resultados publicados al cierre de 2012 en la página oficial del Sistema Nacional de Seguridad Pública.
En el proceso de convocatoria y reclutamiento, Coahuila presenta un avance del 0%, es decir, prácticamente el proceso de selección de nuevos elementos está detenido en la administración.
En los tres rubros de equipamiento, tanto para el personal policiaco, como de equipamiento de redes y tecnología que requiere el Sistema Nacional de Seguridad Pública para la transferencia de información confidencial de datos personales, no se reporta avance de la entidad.
De acuerdo con los resultados nacionales, Coahuila se planteó hace 3 años una meta de 422 elementos acreditables en la primera fase, pero a la fecha, en cinco generaciones, apenas se han logrado poco menos de 200, por ello en la entidad se trata de impulsar el programa denominado Coahuila necesita 300 héroes, sin embargo, la convocatoria tiene resultados muy lentos, lo que hace que cada vez más policías sean despedidos por no pasar las pruebas de control, mientras la contratación de nuevos elementos avanza a un ritmo casi cinco veces menor a lo esperado.
¿A QUIÉN CREERLE?
Mientras el decretario de Seguridad Pública en la entidad, Gerardo Villarreal Ríos, asegura que todos los elementos ya pasaron las pruebas de control y confianza, y advierte que Coahuila ya va en la quinta generación de policías acreditables, la información oficial señala que Coahuila tiene apenas el 12.8 por ciento de la formación del personal y el 7% de la implementación de los sistemas para realizar las pruebas de control al personal.
Hasta el momento, se han invertido cerca de 70 millones de pesos en la acreditación de personal capacitado, mientras que la bolsa para Coahuila es de 200 millones de pesos, pero continúa sin ejercerse por los retrasos en la aplicación de los programas.
Pirateo de policías
Uno de los rubros que obran en contra de los esfuerzos de Coahuila, obedecen principalmente al pago de los servicios de seguridad que se destinan para cada elemento, quienes tienen durante la capacitación una beca mensual de 5 mil pesos y un pago promedio de 16 mil pesos mensuales, mientras en estados como Nuevo León, la capacitación es sinónimo de un pago de 8 mil pesos mensuales de beca, y un pago que va desde los 19 a los 22 mil pesos para cada elemento formado bajo los lineamientos de la Policía Acreditable.
En la entidad se tiene al menos el registro de 30 elementos que han solicitado su cambio a Nuevo León, e incluso a la propia Policía Municipal de Saltillo debido a salarios más competitivos.
Desde hace meses, las campañas de búsqueda de elementos nuevos para Nuevo León se desarrolla en centros comerciales de Coahuila y lugares de mucha afluencia de población.
Mientras que Coahuila capacita y certifica a los policías, basta que los estados vecinos publiquen su tabulador salarial para que los elementos preparados pidan su cambio, lo que también advierte una falta de compromiso de los elementos policiacos para atender los problemas de seguridad en la entidad.
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