MIGUEL CABILDO S.
MEXICO, D.F., 13 de agosto (apro).- Al afirmar que el 50% de los niños en México es obeso, la nutrióloga Mónica Núñez González dijo que ésta enfermedad crónica es el inicio de un sinfín de alteraciones, como insuficiencia renal y respiratoria, presión arterial alta, problemas cardiovasculares, menstruales, y cáncer de útero, entre otras.
Señaló que, según una encuesta de salud, en México el problema es de dimensiones considerables, ya que de cada 10 niños cinco padecen obesidad, y de cada 10 adultos, siete.
En la conferencia "Desórdenes alimenticios", organizada por el Centro de Ciencias Aplicadas y Desarrollo Tecnológico (CCADET) de la UNAM, la especialista dijo que la obesidad no es una condición o estado físico, sino un padecimiento pandémico y "hasta contagioso".
Explicó que los menores o jóvenes son considerados obesos cuando su peso supera al ideal en un 20%.
Afirmó que es grave que esta afección se inicie en la infancia. Explicó que si se origina entre los seis meses y los siete años, el porcentaje de quienes seguirán con peso de más en la etapa adulta es hasta de 40%; si comenzó entre los 10 y los 13, la probabilidad se incrementa a 70%.
Núñez González expuso que la obesidad se clasifica en exógena, por alimentación excesiva, y endógena, por alteraciones metabólicas provocadas por disfunción de alguna glándula endócrina.
Dijo que la más común es la primera. Señaló que, por ejemplo, un kilogramo de peso equivale a siete mil calorías; es decir, "cuando pesamos un kilo más, es como si comiéramos 14 hamburguesas".
Indicó que a este problema contribuyen también factores hormonales, psicosociales y ambientales. Añadió que los padres sobrealimentan a los hijos que, a su vez, no realizan actividad física, además de que las madres con peso de más sirven raciones mayores.
Dijo que la obesidad y la hipoactividad surgen también por estrés o un duelo. "Nos podemos sentir tan tristes que comemos más de lo habitual", expresó.
La nutrióloga sostuvo que en la relación familiar, la probabilidad que un varón herede la obesidad es de 27.5%, mientras que en una mujer es de 21.2%. Agregó que la predisposición se debe a un gen existente en el cromosoma 6.
Señaló que en personas afectadas, las reservas naturales de energía se almacenan en el tejido adiposo hasta provocar enfermedades degenerativas y aumentar la mortalidad. Dijo que cuando se habla de sobrepeso, puede tratarse de hasta 10 kilogramos por arriba del índice saludable; la obesidad, de 20, y la obesidad mórbida, de 30 kilos o más.
Explicó que, además del índice de masa corporal (si el IMC es mayor a 25, equivale a sobrepeso), existen otros indicadores. La obesidad tipo androide, también llamada visceral o central, se identifica porque el cuerpo es parecido a una manzana, con grasa alrededor del ombligo; se relaciona a enfermedad cardiovascular. La otra es la ginecoide o periférica, que produce un cuerpo en forma de pera; la grasa se acumula en las caderas, abundó.
Añadió que en el sector femenino, la grasa tiende a acumularse en el estómago, cadera y muslos, mientras que en los hombres, en el vientre y la cintura.
Proceso14/08/2009
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