ROGELIO AGUSTÍN ESTEBAN
Pobladores de San Luís Acatlán detuvieron a cinco presuntos narcotraficantes e impidieron la intervención del Ejército y la Policía Federal ya que presetenden sancionarlos conforme a sus usos y costumbres
Guerrero • En un hecho sin precedentes, cinco presuntos narcotraficantes fueron capturados por policías pertenecientes a una comunidad indígena de Guerrero que impidieron que el Ejército y la Policía Federal intervinieran, y ahora, analizan castigar a los detenidos conforme a las costumbres de su pueblo.
Se trata de la comunidad de San Luís Acatlán, que desde su fundación en 1995 recibió el primer caso de narcotráfico el pasado 14 de octubre, cuando la autodenominada Policía Comunitaria localizó a cinco personas en posesión de marihuana.
Los implicados fueron arrestados y en tanto, el miércoles 19 de octubre la Coordinadora Regional de Autoridades Comunitarias (CRAC) con los principales comandantes y comisarios de la localidad se reunieron para analizar la forma en que sancionarían a los presuntos narcotraficantes.
Una de las alternativas, fue aplicar sanciones conforme el esquema de los usos y costumbres de las comunidades indígenas. Bruno Placido Valerio, ex coordinador de la CRAC explicó que las autoridades comunitarias decidieron iniciar un proceso de consulta en los pueblos de su interés para establecer el castigo que se les aplicará.
Las sanciones a las que podrían ser acreedores los presuntos narcotraficantes según los usos y costumbres de dichas comunidades indígenas, consisten fundamentalmente en el trabajo comunitario y la terapia de grupo, lo que constituye la base de un proceso de reeducación.
Respecto a los detenidos, sólo se sabe que se trata de cuatro habitantes de la zona y uno más foráneo. Ante la complejidad del tema, decidieron reprogramar una segunda reunión para el cinco de noviembre. Sin embargo, el caso llegó a oídos de autoridades militares y federales.
La tarde del martes 25 de octubre, personal de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) y Policía Federal (PF), incursionó en la zona de influencia de la CRAC e intentaron llegar hasta la Casa de Justicia De San Luís Acatlán para rescatar a los presuntos narcotraficantes, señaló Placido Valerio.
La Policía Comunitaria y habitantes del lugar frustraron el operativo de los militares y federales, pero no impidieron la detención de Agustín Barrera, uno de los fundadores de la comunidad indígena. Los pobladores demandaron que la detención fue arbitraria y carecía de argumento legal.
Una comisión de representantes de la CRAC viajó a Chilpancingo para reunirse con el secretario General de Gobierno, a quien le explicaron lo ocurrido y pactaron una reunión con Iñaqui Blanco, delegado de la Procuraduría General de la República (PGR) en Guerrero, la cual se desarrollará el jueves 27 de octubre.
Bruno Placido Valerio sostiene que la intención de los federales y soldados era liberar a los cinco detenidos. Aunque se retiraron de San Luis de Acatlán, los militares mantienen un punto de revisión en la carretera Cruz Omahuac ya que es paso obligado para llegar a la cabecera municipal de Iliatenco, uno de los municipios en que tiene presencia el sistema de seguridad indígena.
La CRAC opera en 70 comunidades de 12 municipios de la Montaña y Costa Chica, aunque no tiene reconocimiento legal funciona desde hace 16 años y ha logrado abatir la incidencia delictiva en un 95 por ciento, con armas de bajo calibre, sin mucha tecnología de comunicación ni patrullas para realizar sus recorridos.
Milenio
27/10/2011
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