La redacción
CHILPANCINGO, Gro., 16 de diciembre (apro).- La estela de muertes atribuida a “El jefe de jefes” comenzó con una doble acción, casi simultanea, registrada el 11 y 12 de septiembre pasado en Morelos y Guerrero, cuando fueron ejecutados seis operadores del cártel de Sinaloa.
Entre las víctimas se encontraba Mario Pineda Villa, “El MP”, uno de los operadores de los Beltrán Leyva en ambas entidades y por quien la Procuraduría General de la República (PGR) ofrecía una millonaria recompensa.
A partir de esa fecha continuamente aparecieron hombres ejecutados a tiros y desmembrados en Morelos y Guerrero, destacando como la jornada más violenta la registrada el 9 de octubre, cuando fueron encontrados 17 hombres acribillados y con mensajes de “El jefe de jefes“ a lo largo del corredor Cuernavaca-Acapulco.
Las advertencias por lo general iban dirigidas a “traidores, secuestradores y extorsionadores”.
El crimen más reciente ejecutado por los operadores de “El jefe de jefes” se registró este miércoles en Chilpancingo, donde fueron esparcidos los despojos de dos hombres desmembrados en el monumento a Las Banderas, con un mensaje en que se pedía a la ciudadanía no alarmarse por estas acciones, pues eran “por el bien de todos”.
Informes oficiales indican que a partir de la división del cártel de Sinaloa, Arturo Beltrán y Joaquín El Chapo Guzmán comenzaron a librar una disputa por las plazas de Morelos y Guerrero.
En esas entidades, por décadas los operadores de ambos cárteles han tenido una fuerte presencia y arraigo en las estructuras de gobierno y sociales de las siete regiones.
Fue entonces que comenzó la serie de ejecuciones atribuidas a “El jefe de jefes”, bajo una estrategia de limpieza de las principales ciudades como Cuernavaca, Chilpancingo y Acapulco, y que las autoridades federales interpretaron como “una purga” del cártel de los Beltrán Leyva, debido a que en los mensajes acusaban a sus operadores de “traición”.
Ejemplo de ello fue el descubrimiento del cuerpo de “El MP” la madrugada del viernes 11 de septiembre en Cuernavaca, quien fue ejecutado a tiros sobre la carretera federal, a la altura del kilómetro 58.
Ahí también se localizó el siguiente mensaje escrito sobre una manta: “Así terminan los traidores y los secuestradores, aquí está el ‘M.P.’, así terminan todos igual que este marrano. Siguen Jonathan Sido Mendoza Vega, Chui Pineda Medina, Carlos Campos ‘Comando’. EL JEFE DE JEFES Arriba Sinaloa”.
Esta advertencia se convirtió en el eje de los mensajes firmados por “El jefe de Jefes” y una lucha por la disputa de plazas hasta este miércoles, en que Arturo Beltrán Leyva murió durante un enfrentamiento contra miembros de la Marina en Cuernavaca.
Proceso 17/12/2009
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