Rubén Moreira, beligerancia demagógica

Con la inseguridad dominando en todo el estado, más de 40 mil empleos perdidos y 2 periodistas sacrificados, el llamado “Zerevro”, desplegó su vehemencia gandalla para suceder a su hermano Humberto en la gubernatura

*El martes 19, líderes priistas tomaron la oficina del alcalde Eduardo Olmos, por no recibir los apoyos prometidos por Rubén, para ser entregados a los acarreados

Juan Monrreal López
Enero 25 de 2009
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Torreón, Coahuila.- Luego de rendirle pleitesía al Cristo de las Noas, el diputado federal, presidente estatal del PRI, hermano del gobernador de Coahuila, Rubén Moreira Valdés, utilizó alrededor de 2 mil acarreados, -bajo amenaza de despedirlos del programa emergente de empleo de barrido de calles, promesas de repartirles despensas, paquetes de construcción, focos, leche, etc-, procedentes de las colonias marginales y ejidos, en una protesta arreglada para criticar al gobierno federal de Felipe Calderón, por el llamado gasolinazo, la carestía, la inseguridad, así como el desempleo existente en Coahuila.

Rubén Moreira, conocido como “El Zerevro”, fue acompañado en la cruzada por funcionarios del ayuntamiento, diputados federales, dirigentes del PRI, caciques de colonias, que de acuerdo a la confesión de priistas a Demócrata Norte de México; la protesta la usó el hermano del gobernador, “para comenzar a calibrar las fuerzas que apoyarán la eventual candidatura de Rubén, al gobierno de Coahuila, en el año 2011”.

La marcha, estuvo llena de contrasentidos. En un estado laico, dónde los Moreira Valdés se han declarado juaristas, con Humberto convertido a la masonería con el nivel de Gran maestro grado 33; el primer acto de la protesta consistió en dar una vuelta por el adoratorio del Cristo de las Noas, iglesia a cargo del párroco, José Rodríguez Tenorio, conocido como “El Padre Grillo”, un cura entregado al poder.

Citada a las 7 y 30 minutos de la mañana del sábado 16 de enero, la caminata acentuó los desatinos de quienes decidieron el recorrido de la protesta.

El camino seguido hasta la explanada del PRI municipal, sita en la Avenida Morelos, mantuvo semi clandestina la inconformidad, muy lejana del horario de los ciudadanos, tanto como de los puntos de la ciudad donde los habitantes convergen.

Sumisos, los funcionarios públicos que acompañaron a Rubén Moreira, únicamente atinaban a representar muecas parecidas a las sonrisas.

Sólo el presidente del PRI municipal, el enriquecido y contumaz violador de la ley, el diputado local, Jesús Salvador Hernández Vélez, aprovechó el compadrazgo que lo une a Rubén “El Zerevro” Moreira, para emitir críticas del lugar común al fracasado gobierno federal que dirige Felipe Calderón Hinojosa.

El millonario, Salvador Hernández Vélez, de cuyas bodegas situadas en La Colonia Eduardo Guerra, se operaron miles de los botes de impermeabilizante, pintura, cemento, focos, sopas, leche, el monedero electrónico,-conocido como la tarjeta de la gente-, que fueron usados como anzuelos para arrancar los votos de las colonias marginales de Torreón, vociferó que esta es una muestra de la inconformidad existente en contra del gobierno federal.

Bajo la sombra de su compadre Rubén Moreira; Hernández Vélez, se sirvió del lazo afectivo, regodeándose frente al grupo de funcionarios priistas que iban en la caminata.

Salvador Hernández, es manejado como posible sustituto de Eduardo Olmos Castro, en la alcaldía torreonense.

Iban en la marcha, el diputado federal, Héctor Fernández Aguirre, que cuando fue titular de la secretaría de Fomento Agropecuario, se le agarró con manos ilegales en las chequeras públicas, por desviar más de 40 millones de pesos para sus empresas.

También, el legislador federal, Miguel Riquelme Solís, conocido como “Míster Triquiñuela”, por dedicarse a desviar sumas millonarias desde la secretaría de Desarrollo Regional de La Laguna (SDRL), dineros que sirvieron para apuntalar las campañas priistas a las diputaciones locales, diputados federales, presidencias municipales, en los procesos electivos efectuados en Coahuila, desde octubre del 2008.

De la misma forma, el secretario General del PRI, José Luis Flores Méndez, “El Chapo”, sonreía hacia todos lados. Flores Méndez, fue alcalde de San Pedro de las Colonias, gracias a su cercanía cariñosa con el gobernador de ese tiempo, Elíseo Mendoza Berrueto.

Las cuentas públicas entregadas por “El Chapo”, al municipio de San Pedro, fue de faltantes y desvíos de recursos millonarios, ilegalidades que no fueron dificultad enterrar en los archivos muertos del Congreso de Coahuila.

Noé Garza Flores,-cercano a Rogelio Montemayor, delegado del CEN del PRI en Coahuila, montado al carro del moreirismo por agradecimiento de que su hijo Noé, es funcionario de este régimen-, caminaba con parsimonia, apechugando el maltrato del que ha sido objeto en el sexenio, pero compensado con dinero y poder para su clan.

Junto a ellos, la diputada local, Verónica Martínez, dirigente muy mayor del Frente Juvenil Revolucionario (FJR), con ligas afectivas muy estrechas con Rubén Moreira, marchó sin contingente alguno. A decir de los priistas, a Verónica Martínez, la “convirtieron en la diputada costurita, por aquello de las puntadas de Rubén”.

Como remate, la presencia de Mario Cepeda; un golpeador de las colonias populares, quien fue procesado por homicidio y que según Rubén Moreira, “representa al nuevo PRI”.

Por último, el ex priista, ex neo perredista Manuel de Jesús Landeros, - hijo de Jesús Landeros, un antiguo cabecilla priista de principios de los años 70, que invadía terrenos por encargo -, vuelto al redil del priismo, dio el toque de “pluralidad” a la marcha de beligerancia demagógica del “hermano sucesor” Rubén Moreira, quien de forma embustera, amenazó con realizar más protestas en los municipios de Coahuila, contra el llamado gasolinazo.

El verdadero trasfondo de los pataleos de Rubén, “es afirmar su candidatura a gobernador”, dicen priistas a Demócrata Norte de México, pese a que faltan, cuando menos 15 meses para que se conozca la convocatoria que marque las reglas para suceder a Humberto Moreira.

Este es el motivo central de la protesta ficticia de Rubén Moreira, quien con la complicidad de funcionarios de SDRL; burócrata del Ayuntamiento de Torreón, a cargo de Lalo Olmos; amenazó con despedir a las personas contratadas para barrer las calles de la ciudad, de no asistir a la manifestación.

Líderes priistas toman oficinas de Lalo Olmos, por no cumplir las promesas de Rubén Moreira

Luego de permanecer más de 2 horas en la antesala de la oficina del alcalde Lalo Olmos, el martes 19, más de 20 líderes priistas arrollaron al secretario del Ayuntamiento, como única forma de poder acceder hasta el escritorio de Eduardo Olmos, quien junto con Rubén Moreira, prometió canonjías en materiales de construcción, despensas, dinero en efectivo, que se entregarían entre el domingo 17 y el lunes 18, por el acarreo de personas a la marcha del sábado 16.

Molestos, incluso iracundos, los cabecillas priistas de las colonias marginales de la ciudad, exigieron a Olmos Castro, la entrega de las prebendas en el transcurso de la semana, con la amenaza de retornar a la presidencia, hasta que las sinecuras les sean concedidas.

Y mientras las exigencias de los lidercillos priistas corroboraban los desvíos del dinero público del erario de Coahuila, con fines proselitistas de los Moreira y el PRI; el senador Guillermo Anaya Llamas,- conocido como el primer compadre del país-, subía un punto de acuerdo a la tribuna legislativa del Senado de la República, con la intención de que la Auditoría Superior de la Federación, investigue los supuestos desvíos de más de 400 millones de pesos, exclusivamente del programa conocido como el monedero de la gente.

Pronto se sabrá cuanto nos ha costado las campañas moreiristas, o al menos las cantidades sustraídas ilegalmente del presupuesto coahuilense, por órdenes del clan que dirigen Humberto y Rubén Moreira.

Email: jmonrreall@yahoo.com