Horizonte ciudadano
Rosa Esther Beltrán Enríquez
Julio 30 de 2020
Durante el primer lustro de la década de los 70 del siglo pasado se registró una movilización estudiantil que luchaba por la autonomía universitaria, en ella participaron los alumnos de la Escuela de Ciencias Químicas, la de Economía, de la Preparatoria Popular, el Ateneo, Preparatoria Nocturna, Trabajo Social y Enfermería, en Torreón Economía, Ciencias Políticas, Medicina, entre otras, esas escuelas funcionaban como privadas, los profesores no participaron el movimiento fue realizado por los estudiantes, entonces era gobernador don Eulalio Gutiérrez Treviño.
La lucha fue reprimida con violencia, pero se logró la autonomía, se elaboró el Estatuto universitario que resultó el sustento democratizador que instituyó el Consejo Universitario y el voto universal y secreto de todos los universitarios en la elección de autoridades, aunque poco duró el gusto ya que pronto fue corrompido el voto estudiantil y la autonomía le fue entregada al gobernador priista en turno, la rectoría se convirtió en un trampolín para lograr puestos públicos y el Consejo Universitario es un costoso guiñol manejado desde la rectoría.
En 1984 se realizó una movilización estudiantil formidable, el movimiento Pro Dignificación con el que se denunciaba el fraude electoral por la rectoría y se reclamaba que presuntamente había sido el instrumento para derrotar a los entonces candidatos, Armando Fuentes Aguirre y Jaime Martínez Veloz, éste había sido director de la Escuela de Arquitectura y propuso el rescate de la autonomía universitaria y por una universidad que promoviera la participación del estudiantado y el respeto al Estatuto Universitario.
El rector en ese tiempo estaba muy ligado al gobierno estatal. José Guadalupe Robledo G. publicó esta nota: “Ante la inconformidad de fraude en las elecciones y el periodo de campañas acompañadas de gastos excesivos, porrismos y la imposición del rector saliente Oscar Villegas Rico, se formó alianza por las fuerzas de Catón y el Jimmy, uno conservador y clerical y el otro acompañado de la izquierda y la fuerza popular, formaron el Movimiento Pro Dignificación de la Universidad”.
Imposible relatar en unas cuantas líneas la movilización de Pro Dignificación que sumó no sólo a los estudiantes, sino a la población en general.
Ahora surge el Movimiento Estudiantil de Coahuila (MOESCO), en una situación de crisis epidémica, y la rectoría de la UAdeC se atreve a imponer cuotas excesivas por inscripciones y reinscripciones de las que podría obtener cerca o más de 150 mp.
Mientras que muchos padres de familia están sin trabajo a causa del Covid, sin poder pagar el transporte de sus hijos el rector pretende quitarles el transporte gratuito, es inexplicable en alguien que viene de la línea de masas, organización de ultra izquierda tome estas decisiones, ¿o es que usted rector, recibe órdenes de arriba?
¿En dónde está parado Hernández Vélez? ¿ya sacó a los aviadores a los que mencionan como comisionados? Dicen que el rector gana más que el Presidente de la República, en realidad, ¿cuánto le pagamos? Señor rector en nuestra universidad es imprescindible que haya transparencia, porque todo se paga con nuestros tributos.
El incremento impuesto a las inscripciones y reinscripciones es altísimo, desmedido. Dicen los que saben que hay ahí una academia en la que sus profesores pueden ganan más que el rector, ¿diga, es cierto?
A la petición del Moesco de una disminución del 80 % a las cuotas, usted propone que. “se establecerá por el Consejo”, pregunto, ¿que no es la Comisión Hacendaria de la Universidad quien debe determinarlo?
Monesco hace otras solicitudes y el rector responde que será en el Consejo Universitario donde se tomen y decidan esas demandas.
Verdades a medias, actitudes huidizas son las que el rector aduce; miembros del Monesco, mantengan sus decisiones, no claudiquen, no desistan de sus derechos, no dejen que los embauquen, que los presionen, no.
No hay comentarios:
Publicar un comentario