RAÚL A. RUBIO CANO
Mayo 23 de 2018
Ayer se presentó en el Congreso del Estado de Coahuila, solicitud de Punto de Acuerdo para establecer Declaración de Procedencia en el caso del supuesto suicidio de la Notaria Pública N°51, Hilda Elena Sánchez de León, en Enero pasado, ya que debido a situaciones muy particulares de Notarios Públicos de esa entidad, del Poder Judicial y familiares “picudos” de la fallecida en disputa por su herencia (como ya lo comentamos ayer en Monitor Político), resulta que el hermano de Hilda Elena, el ingeniero químico Alberto Sánchez Osoria, consideró pertinente que además del Poder Judicial, se debía turnar el caso al Poder Legislativo del Congreso del Estado, para que desde ese Poder, se hagan las indicaciones respectivas y lograr que se establezca Justicia en tan lamentable caso. Ayer, desde temprana hora, el influyente periódico Zócalo/Saltillo, manejaba en su columna “Palacio Rosa”, escrita por El Marqués, que en el Palacio Legislativo se presentarían familiares y abogados de Hilda Elena Sánchez para exigir Justicia, lo cual desató muchas expectativas informativas y una nube de medios de comunicación, de lo más diverso, entrevistaron al ingeniero Alberto Sánchez sobre el particular y tanto él, como sus abogados, fueron atendidos personalmente por el Presidente del Congreso de Coahuila, el diputado Samuel Rodríguez y el Oficial Mayor, Carlos Estrada, recibiendo ellos la solicitud de Alberto Sánchez y ofreciendo el Presidente del Congreso que el próximo martes 29 de mayo, en sesión ordinaria, dicha solicitud se integrará para que sea turnada al Pleno y demandado su paso a la Comisión de Justicia y la Comisión de Derechos Humanos. No es para menos, como comentábamos ayer en Monitor Político, hay serios cuestionamientos sobre ese supuesto suicido de Hilda Elena Sánchez y eso, es lo que atrajo ya el caso en el Poder Legislativo de Coahuila y no se diga, a los medios de comunicación de ese estado y nacionales. Igualmente, el próximo lunes 28 de mayo, el Juzgado Segundo de lo Civil, dará lectura al testamento de la difunta, una realidad aún desconocida para buena parte de sus familiares y con serias implicaciones en su elaboración ante Notario Público, ya que tal testamento, fue conformado en una hora y no se consideró la presencia de un tutor para auxiliar a Hilda Elena, porque desde hacía años, padecía una depresión profunda y consumía medicamentos psiquiátricos; además, era una persona de la tercera edad. Cabe por último mencionar, que dentro de la Declaración de Procedencia solicitada al Congreso de Coahuila para el mencionado caso, se demanda investigar al hoy Notario Público N°104, José Luis del Bosque Valdez, ya que aseguran familiares de Hilda Elena, de que Del Bosque había sido su chofer. Por lo tanto, no cabe la menor duda, el caso de este supuesto suicidio y disputa por la herencia de la fallecida Notaria Pública N° 51, empieza a ser el drama de una verdadera novela policiaca y de terror, en donde también el uso de la psiquiatría, algo tiene que ver ¡Órale! raurubio@gmail.com
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