RAÚL A. RUBIO CANO
Noviembre 7 de 2016
Con el fallecimiento de Israel Cavazos Garza, no termina la polémica de la pérdida del Acta de Fundación del 20 de septiembre de 1596, documento que corresponde a la tercera y última fundación de la metropolitana ciudad de Monterrey y que, en su búsqueda a partir de enero de 1989 por el comunicólogo Armando de León Montaño y un servidor, abrió una sonada indagatoria de la cual el maestro Cavazos se defendió en varias ocasiones pero, ante las pruebas que fueron brotando al paso de días, meses y luego años, el señor guardó cuestionado silencio. Ruedas de prensa, conferencias, entrevistas en los diferentes canales de televisión y la radio, no digamos ríos de tinta en la prensa local y nacional y publicaciones especializadas, inclusive, nuestro ingreso a la Sociedad Nuevoleonesa de Historia Geografía y Estadística, fue con el trabajo de indagatoria y polémica contra Israel sobre la Pérdida del Acta de Fundación. Todo ello fue forjando una realidad cognitiva en muy diversos sectores académicos, sociales y políticos, sobre ese lamentable extravío y que poco a poco, fue dando un gran producto: que el patrimonio histórico de los nuevoleoneses debe de cuidarse seriamente y de que el mismo, no puede ser un botín de particulares ni de un mercado negro; peor aún, cuando estos poseedores o traficantes son funcionarios públicos que supuestamente se avocan a su rescate y conservación. El tema se hizo público y se reforzó la polémica del Acta de Fundación de Monterrey, cuando se descubrió que el mismo Cavazos se había llevado para su casa el Archivo Municipal de Guadalupe, “para que no se lo robaran” según consta en los testigos entrevistados sobre el caso o, que ante los argumentos de Cavazos al jactarse de tener 40 años dirigiendo el Archivo Municipal de Monterrey, fue auditoría al mismo, durante la administración de Felipe de Jesús Cantú, que resultó un faltante de unos 8 mil documentos históricos. El caso es grave porque en tales saqueos, Cavazos calló ante los medios de comunicación y por su parte, las autoridades respectivas desde municipales, estatales o federales como el INAH o la PGR, no tomaron interés alguno. Así las cosas, llama más la atención, que tanto importantes historiadores locales o funcionarios públicos, minimizaron o quisieron ponerse del lado de Cavazos en su defensa, pero, lo monumental de los hechos y respectivos argumentos históricos de esos años, fueron tan fuertes que demostraron el brutal saqueo que se vive en la entidad. Recientemente, la documentación histórica (documentos que son de la Nación) en poder de Cavazos, se transfirió por intercambio de una jugosa suma millonaria, a la Fundación Dr. Idelfonso Vázquez Santos, A.C. y se exhibirá en casa del Barrio Antiguo. La brutal ignorancia o el saqueo imperante en estas tierras, hace que esto que comentamos sea “peccata minuta” ante la figura monumental que se le ha creado a Israel Cavazos ¡Órale! raurubio@gmail.com
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