martes, 20 de enero de 2015

La sombra de “El Yunque” en el Partido Humanista


El expanista Javier López Macías y el nuevo dirigente Irys Salomón durante la presentación del Partido Humanista. Foto: Eduardo Miranda
El expanista Javier López Macías y el nuevo dirigente Irys Salomón durante la presentación del Partido Humanista.
Foto: Eduardo Miranda
MÉXICO, D.F. (apro).- Aún no enfrenta su primera elección y el Partido Humanista, integrado por un amasijo de grupos de izquierda y derecha, ya se desgarra en pleitos internos por el control de los recursos, los cargos y las candidaturas.
En unos cuantos días se destituyó al coordinador nacional del nuevo partido, el expanista Javier López Macías, y lo sustituyó Ignacio Irys Salomón –veterano de siete partidos–, a quien el Instituto Nacional Electoral (INE) desconoció y ahora la decisión la tomará el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF).
El conflicto se produce en medio del registro de la plataforma electoral y de las precandidaturas a diputados federales, sobre todo los primeros lugares de las plurinominales –que no hacen campaña y entran directo al Congreso–, pero también por los más de 120 millones de pesos en prerrogativas y las posiciones de afines a cada grupo en la dirigencia nacional y en los estados.
En las elecciones de junio este partido y los otros dos nuevos –Encuentro Social y Morena– debe obtener, al menos, el equivalente a 3% de los votos emitidos para conservar su registro. Si vota 42% de los electores, deberán lograr un millón 300 mil votos.
Al crearse el Partido Humanista –“humanoide”, le llaman ya–, López Macías asumió la coordinación nacional de la Junta de Gobierno, la máxima instancia de dirección, integrada por 12 personas, cuatro de cada uno de los tres grupos fundadores.
Irys Salomón, vicecoordinador nacional, tiene cuatro afines e igual número Ricardo Espinoza López, un expriista líder sindical que con el apoyo de Vicente Fox y Felipe Calderón creó en 2006 la Alianza Sindical Mexicana (ASM) y ahora es el representante del Partido Humanista ante el INE.
Ambos grupos destituyeron a López Macías como coordinador nacional y nombraron en su lugar a Irys Salomón, a quien el INE desconoció, por lo que el caso fue llevado al TEPJF, que decidirá quién es el legítimo dirigente.
Irys Salomón y Espinoza López acusan a López Macías de intentar quedarse con el control total del partido mediante las imposiciones que ha hecho en la mayoría de los estados, con personas que no son de fiar y hasta familiares.
Por ejemplo, afirman, impuso a Laura Elena de Anda en Aguascalientes, a Luis Juárez en Baja California y a José Luis Montoya en Baja California Sur, donde este dirigente es acusado de falsificación de documentos por otro líder, Jorge Bremer.
En Chiapas, López Macías supuestamente impuso a Miguel Martínez, en Chihuahua a Alfredo Ríos y en Nuevo León colocó como presidente a su hermano, Jesús López Macías.
López Macías es también acusado de tener el control de varios estados a través de Sergio Nevárez, secretario de Organización de la Unión Nacional Integradora de Organizaciones Solidarias y Economía Social (Unimoss), organismo de productores creadoa bajo los auspicios del gobierno de Fox.
Por ejemplo, en Coahuila, de donde es originario López Macías, el presidente es Alfredo Nevárez, y en Guanajuato lo preside Everardo Nevárez, hermanos de Sergio, cuyo hijo del mismo nombre es el dirigente en Durango.
Hay por lo menos dos casos de dirigentes bajo sospecha que supuestamente impuso López Macías: En Quintana Roo, el presidente Daniel Romero fue personero de Greg Sánchez, el exalcalde de Cancún acusado de lavado de dinero, y en Tamaulipas José García Molina tiene denuncias penales.
Sin embargo, mientras el TEPJF no emita su fallo sobre quién es el coordinador nacional del Partido Humanista, el cargo lo ostenta López Macías, a quien desde Coahuila panistas lo identifican como miembro de El Yunque.
“Soy un yunque de izquierda”, ironiza López Macías sobre su negada militancia en El Yunque, la organización clandestina de ultraderecha que domina amplias parcelas del PAN y de organismos empresariales como Coparmex, con cuyos expresidentes Jorge Ocejo y Antonio Sánchez Díaz de Rivera colaboró.
Junto con contingentes de campesinos, el Partido Humanista se formó con muchos panistas despechados. La más reciente panista que se sumó es Laura Gurza Jaidar, directora general de Protección Civil de la Secretaría de Gobernación con Felipe Calderón, cuyo hermano Luis también renunció al PAN y ganó una diputación local por el PRI en las recientes elecciones en Coahuila.
Ambos son hijos de Edmundo Gurza, un viejo panista de Torreón, que fue mentor de López Macías, quien se afilió al PAN en 1985, justo en la campaña por la gubernatura de Coahuila de Teresa Ortuño Gurza, otra integrante de esta familia y prominente militante de El Yunque.
Justamente en Torreón se identificaba a López Macías con esa organización secreta y uno de los que difundió la versión fue el abogado Luis Fernando Salazar Woolfolk, padre del senador panista Fernando Salazar, a su vez asociado a Los Tecos, abiertamente pronazis y antisemitas.
“En el PAN decían que ya estaba repleto de Tecos”, revela López Macías, quien reconoce que, como directivo del Centro Empresarial de La Laguna, él mismo distribuyó –en 1996– solicitudes de afiliación para la Coordinadora Ciudadana.
Esta agrupación política nacional ha sido presidida por Antonio Sánchez Díaz de Rivera y Guillermo Velasco Arzac, dirigentes de El Yunque, y este último fue inclusive vicepresidente de Unimoss al lado de López Macías.
“Nunca estuve afiliado a la Coordinadora, los conocí por esa razón. Y ahí viene otra historia de que soy de El Yunque. Soy un yunque de izquierda”, exclama y suelta la carcajada.
Su antagonista es Irys Salomón, el líder campesino desde hace medio siglo, expresidente de la Coalición de Organizaciones Democráticas, Urbanas y Campesinas (CODUC) y fundador de los partidos Socialista de los Trabajadores (PST), Frente Cardenista de Reconstrucción Nacional (PFCRN), Mexicano Socialista (PMS) y de la Revolución Democrática (PRD).
En 2003 trató de crear un quinto partido, el Campesino y Popular (PCP), pero no alcanzó a cubrir los requisitos, por lo que se unió a la feminista Patricia Mercado para formar Alternativa Socialdemócrata y Campesina (PASC) que, tras la ruptura con ella en 2006, perdió el registro.
Allegado a Cuauhtémoc Cárdenas, Irys llegó a proponerle ser el candidato presidencial de PASC ese año y participó en una reunión, en 2006, en la Fundación para la Democracia, en la que se discutió no apoyar a Andrés Manuel López Obrador: Luego el michoacano aceptó la chamba que le dio Fox.
Veterano formador de partidos –siete en su historia– y de organizaciones campesinas, como la Unión Nacional de Trabajadores Agrícolas (UNTA), Irys Salomón –sobrino del siniestro jefe policiaco José Salomón Tanús–, aclara: “En donde nunca he militado es en el PRI ni en la Central Nacional Campesina (CNC)”.

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