Nada cambió con esta nueva administración, por el contrario, el saqueo al municipio peor que en 1998-2000
Juan Monrreal López
Noviembre 17 de 2021
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Torreón, Coahuila. – Desde 1997, año que ganó por primera vez la presidencia de Torreón, Jorge Zermeño Infante, adoptó la política de “El yo no fui”, para justificar la voracidad con la que actuaban todos los funcionarios municipales, incluido él, para allegarse ilegalmente bienes del ayuntamiento, contratos de obra pública, “moches millonarios” para conceder compras a los proveedores, precios inflados en las adquisiciones municipales, dinero ilegal que sacó de la quiebra al grupo de funcionarios de los que se rodeó Zermeño Infante, que hace 23 años como hoy, considera que las críticas de la sociedad, de los activistas sociales, así como los hallazgos de desvíos y faltantes de dinero de la Cuenta Pública Municipal detectados por Auditoría Superior del Estado (ASE), son parte de un complot orquestado por fuerzas que conspiran contra su gobierno, “ donde las huellas de esta Administración están a lo largo y ancho de nuestro municipio (Sic)”, y tiene razón; sólo en el año 2018, la ASE detectó faltantes de al menos 332 millones de pesos sin soportes contables, en tanto el arqueo de los presupuestos ejercidos durante 2019, 2020 y 2021, siguen acumulando evidencias de daño patrimonial al ayuntamiento.
De acuerdo a las evidencias contables recabadas por las auditorías de la ASE, el ejercicio fiscal de la administración de Jorge Zermeño Infante, en 2018 acumuló observaciones que no se aclararon, pero tampoco fueron solventadas por alrededor de 332 millones de pesos, por lo que la ASE interpuso denuncia penal el pasado 28 de julio en la Fiscalía Especializada en Hechos de Corrupción de Coahuila (FEHC).
En la querella, se sabe que contiene hechos considerados delitos por el Código Penal de Coahuila, lo que pone a varios funcionarios relacionados con estas inconsistencias contables, cerca de ir a la cárcel.
En la denuncia realizada por la ASE ante la FEHC, aparecen como hace 23 años, los mismos nombres que fueron ligados a prácticas ilícitas en la primera ocasión en que Jorge Zermeño, ganó la presidencia municipal; Hernán Sirgo Ortiz, Juan José Gómez Hernández, Tomás Galván, pero como siempre, son justificados y protegidos por el alcalde Zermeño Infante.
La acusación interpuesta ante la FEHC se armó con dos carpetas de investigación a las que se les numeró como expedientes 026 y 027.
En el expediente 026 se narran 45 hechos que establecen delitos como, ejercicio abusivo de funciones, peculado, acciones tipificadas como violaciones a la ley establecida en el Código Penal, generando un quebranto por 170 millones de pesos.
Las carpetas aglutinadas en el expediente 027 suman 30 hechos localizado únicamente en el Sistema Municipal de Aguas y Saneamiento (SIMAS), bajo la batuta de Juan José Gómez Hernández.
La administración de SIMAS-Torreón, dirigida por Gómez Hernández, reúne ilegalidades tipificadas por el Código Penal de Coahuila como; asignación ilegal de obra pública y de contratos de obra pública, peculado, ejercicio abusivo de funciones en la modalidad de deducción ilegal de subsidios; también, adquisiciones, arrendamientos, enajenaciones ilegales, entre otros delitos, lo que generó una pérdida de 162 millones de pesos, según asienta la ASE en la querella.
Como en la primera administración zermeñista, los funcionarios involucrados, – con más colmillo y mayor cinismo-, han hecho caso omiso a los citatorios emitidos por la FEHC.
En el caso de Jaime Hernán Sirgo Ortiz, ni se ha despeinado en contestar los citatorios girados por la FEHC.
Por su parte, Juan José Gómez, simplemente se abstuvo de presentarse ante el organismo anti corrupción.
Lo mismo hizo, Antonio Loera López, quien para no comparecer se justificó con un comprobante médico, como si la presentación fuera opcional.
Tan poca importancia le dan a la denuncia de la ASE ante la FEHC que la tesorera Mayela Ramírez Sordo, ha declarado que las tipificaciones se encuentran solventadas.
A su vez, como siempre lo ha hecho, Jorge Zermeño, declaró respecto a esta denuncia presentada por la ASE, el pasado 28 de julio, que todo se encuentra resuelto, y que sólo es cuestión de formas.
La realidad es que existen suficientes elementos para que varios funcionarios de Jorge Zermeño Infante, pisen la cárcel. – incluido él-, ya que no se trata de ninguna conspiración, si en cambio, de evidentes actos de corrupción, según integró los expedientes la ASE.
Ojalá la FEHC llegue a fondo de esta investigación; no puede convalidarse la eterna evasión de Zermeño Infante, quien, hasta ahora, ha gozado de impunidad al igual que su familia.
“El yo no fui”, no justifica las ilegalidades cometidas en el año fiscal 2018 en el que existen manejos tipificados como delitos por la Auditoría Superior del Estado.
Faltan las revisiones de los años 2019, 2020, 2021, y todo apunta que saltará más pus de esta administración que además dejará litigios perdidos con particulares, adeudos a CONAGUA y la CFE, entre otras ilegalidades que serán heredadas a la próxima administración.
El Tuit, colgado por Jorge Zermeño, el pasado 28 de octubre en esa red social diciendo que “las huellas de esta Administración están a lo largo y ancho de nuestro municipio (Sic)”, tiene razón; en todos los rincones de este ayuntamiento apesta a corrupción.
Twitter: @jmonrreall
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