En una ceremonia que reunió a decenas de personas
EL UNIVERSAL.- SINALOA , miércoles 20 de enero 2021 En el cementerio Jardines de Humaya, uno de los más exclusivos de la capital del estado, Juan José Esparragoza Monzón "El Negro", hijo de uno de los fundadores del Cártel de Sinaloa, del mismo nombre, conocido como "El Azul", fue sepultado bajo los acordes de la banda sinaloense y la liberación de globos azules y blancos. La ceremonia de despedida del hijo de Juan José Esparragoza Moreno fue privada, con la asistencia de decena de familiares y amigos que portaron globos de gas, los cuales liberaron en su memoria, mientras la banda de música tocaba un corrido en su memoria.
"El Negro" o "El Azulito", como se le conocía, falleció el domingo pasado de COVID-19, luego de permanecer hospitalizado por casi dos meses, con un nombre distinto, por lo que elementos de la Fiscalía General de la República se presentaron para tomarle muestras genéticas de su cuerpo y sus huellas para certificar su identidad.
Juan José, quien era buscado por las autoridades federales y estatales por su evasión del centro penitenciario de Culiacán en el mes de marzo del 2017, junto con cuatro internos más, vinculados al Cártel de Sinaloa, recibió en la casa funeraria enormes coronas de flores.
De forma inicial, su cuerpo fue depositado en una casa funeraria ubicada en la colonia Jorge Almada, en el segundo cuadro de la ciudad, donde fue depositada una enorme corona de rosas y flores de varios colores, con las iníciales R.C.Q, por lo que se le atribuyó a Rafael Caro Quintero, miembro de la misma generación de "El Azul".
Poco después, su féretro fue trasladado a otra funeraria, de la misma empresa, ubicada en el exclusivo fraccionamiento de Colinas, donde fue velado en forma privada por sus familiares y la tarde de este martes, sepultado en el panteón Jardines del Humaya, ubicado en la salida sur de Culiacán.
El 19 de enero de 2017, Esparragoza Monzón "El Negro", uno de los 122 objeticos prioritarios del Gobierno Federal, fue detenido en Culiacán por fuerzas federales junto con su escolta Jesús Alfonso Ríos Gómez, a los que se les aseguró armas y drogas.
Cincuenta y siete días después, este se logró evadir del centro penitenciario de Culiacán, junto con Jesús Peña González "El 20", Alfredo Limón Sánchez, Francisco Javier Zazueta Rosales "El Pancho Chimalli" y Rafael Guadalupe Félix Núñez "El Chanquito Ántrax", todos ellos vinculados al Cártel de Sinaloa. Después de su fuga, se dio a conocer que el jefe de custodios del Centro de las Consecuencias Jurídicas del Delito de Culiacán, José Mario Murillo Rodríguez, desapareció, por lo que se presume que este se unió al grupo de internos
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