RAÚL A. RUBIO CANO
Julio 15 de 2021
Tal vez la mejor carta que figura en la conformación del gabinete gubernamental de Samuel García, sea la futura secretaria de Educación, Sofía Leticia Morales Garza y obviamente, como todo lo que se le ocurre a Samuel, no le pertenece, sino es la postura de ese bunker Neoliberal, que se niega a ceder en muchas cosas ante el avance del gobierno de la Cuarta Transformación (4T) y donde, el truculento de Carlos Salinas de Gortari y oscuros intereses transfronterizos, sigue haciendo de las suyas. Sofía Leticia, es de esa generación de “Chicos Tec” que la leva del salinismo sacó del ITESM para formar parte de los cuadros que integrarían el poder Neoliberal de Salinas & Co. En esa leva van gentes como Luis Donaldo Colosio, Rogelio Montemayor, Jorge García Murillo, etcétera y bueno, irán en gran cruzada a la ciudad de México a desarrollar bajo la orquestación que hacía Carlos Salinas, desde la Secretaría de Programación y Presupuesto, el arranque de las políticas económicas neoliberales, con el gobierno de Miguel de la Madrid en 1982. Hay toda una historia de Sofía Leticia en esos años del salinismo en el centro del país, de su paso por oficinas de Gobernación, SEP y de organismos internacionales como la OMS, la intervencionista OEA y sus estudios en las universidades de Harvard y Kansas, en fin, una historia que ojalá nos la platique ella. Aquí lo importante es que Sofía Leticia, en entrevista a El Norte de ayer, nos “vende” ya la idea de luchar contra un rezago educativo por la Pandemia y de la necesidad de que se requiere para todos los educandos “un eje de educación socioemocional.” Y bueno, esto es lo que se refuerza en el periódico El Norte y demás medios Fifís, porque suena algo convincente ante el escenario pandémico que hemos padecido, como también, el regresar a clases presenciales o híbridas. En la verdad de las cosas, de la “Revolución de Conciencias” que estamos viviendo, quiera o no aceptarlo Samuel o sus titiriteros, es que lo planteado por Sofía Leticia es sólo la punta del iceberg del sistema educativo en Nuevo León, porque nos enfrentamos a mucho más que eso, a un proceso resultante de 36 años de Neoliberalismo feroz que obviamente, afectó severamente a nuestra niñez y población en general, buscando destruir lo que el gobierno de la Revolución Mexicana había venido construyendo, y que para ser más concretos, es un proceso que en sí, en lo educativo, arranca con la Reforma Educativa del gobierno de Luis Echeverría, donde se disminuyó la lectura, escritura, pensamiento abstracto, historia y geografía, creando con el uso de la tecnología educativa (Conductismo) un autómata que desatendió las funciones de su hemisferio izquierdo (pensamiento científico) y favorecería las del hemisferio derecho (pensamiento mágico-religioso) Ver para empezar: desde Luria hasta Carl Sagan. Lo más dramático de todo ello, es que se construyó ese pueblo y no digamos esa clase media sin “Patria y sin Bandera”. Una clase Fifí, parásita de la economía ficción, del uso masivo de las facturas apócrifas y bueno, un odio jarocho al gobierno de la 4T porque les está eliminado su forma corrupta de vida. En todo ese proceso del Neoliberalismo feroz, se creó un ser individualista, mitómano, despegado de su realidad, destructor de sus semejantes y medio ambiente, sin sentimiento de identidad alguno, anti familia. ¡Qué más prueba de esos bárbaros procesos! que el haber convertido al país en una fábrica de pobres. Hoy, ante la 4T, ante la Economía Moral que se va implementando, se va pensando colectivamente, una colectividad de más de 30 millones de mexicanos que llevaron a AMLO al poder político del país y, que lo siguen apoyando en una forma increíble, por más guerra sucia que se aplica; los indicadores económicos del gobierno de la 4T son pruebas de éxitos y más éxitos y su reconocimiento al interior del país y en el extranjero es contundente, no digamos su lucha contra la corrupción y la impunidad. Por lo tanto, la nueva realidad por educar es otra a la que impuso el Neoliberalismo, los niveles de vida van cambiando favorablemente y eso conlleva a un nuevo perfil de ciudadano y por lo tanto, de sistema educativo y ese es hoy, el reto verdadero para Sofía Leticia, el problema es que sus patrones quieren seguir teniendo a esos jóvenes embrutecidos que votaron por Samuel García, a esos jóvenes de fútbol y carne asada, musiqueros y cerveceros y donde las drogas son la cereza del pastel. Definitivamente, una cosa es lo que quieren los patrones de Nuevo León (Grupo de los Diez) y los corruptos poderes fronterizos Texanos y otra, la fuerza del Tsunami popular de la 4T que sigue llegando a la realidad del noreste mexicano, contundentemente. Realmente, como dice Sofía Leticia, urge una “Pedagogía de la Emergencia”, como la que ella aplicó en el sismo del 2017 en la Ciudad de México, porque estamos en una gran emergencia ante la barbarie Neoliberal para seguir formando seres sin valores, sin ética, sin moral. Basta ver La Mañanera de ayer, en donde el presidente AMLO planteó el nuevo educando que hay que formar, la nueva clase media que se demanda, indicaría: “hay que regresar a la Historia, al Civismo, a la Ética. El tronco común tiene que ser el Humanismo”. Formar: “Buenos ciudadanos, fraternos, solidarios, no clasistas, no individualistas…moralizar, purificar la vida pública…” Esa Mañanera de ayer no tiene desperdicio alguno y es, un referente para los nuevos procesos educativos por implementar, lo demás, es más de lo mismo, es seguir fabricando robotitos al estilo Samuel García, pero, sin la riqueza material y oportunidades que éste tiene, por ser producto de la economía ficción que nos trajo el Neoliberalismo Feroz y que, por lo visto, se niega a irse de Nuevo León ¡Órale! raurubio@gmail.com
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