El nosocomio está incompleto después de más 6 años que se inició su construcción
Juan Monrreal López
Julio 24 de 2021
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Gómez Palacio, Durango. – Planeado como un Hospital Regional de Especialidades de la Comarca Lagunera enfocado a combatir el cáncer, además de enfermedades de ginecología y obstetricia, cirugía pediátrica, traumatología y ortopedia, gastroenterología, psicología, el nuevo Hospital General de Gómez Palacio, se atrasó por más de 6 años para ser entregado a la ciudad, sólo que incompleto; los padecimientos de salud alardeados para tratarse por especialistas quedó reducido a un hospital general, pero lo peor, el acelerador lineal para tratar a los carcinomas presumido como el gran logro del gobierno del priista Jorge Herrera Caldera y posteriormente por el gobernador del “cambio” José Rosas Aispuro Torres, no fue instalado, pese a que el entonces secretario de Salud de Durango, César Franco, declaró a finales del mes de mayo de 2017 que la partida presupuestal para comprar el aparato estaba autorizada y dispuesta para usarse en la adquisición de la máquina, ya que los 8 millones de dólares que costaba el instrumento,- mucho más caro que los adquiridos por el gobierno federal por esos días-, estaba resuelto; sólo que el acelerador lineal no existe en el hospital, oficialmente nunca se ha adquirido, pero tampoco se sabe el destino de los casi 200 millones de pesos que se etiquetaron para comprar este bien hospitalario que no recibió mención del gobernador del estado de Durango, José Rosas Aispuro el pasado 13 de julio, quien se dedicó al mutuo alabo con la otra mafiócrata que cobra como presidente municipal, la morenista, Alma Marina Vitela Rodríguez, que no se molestó,-ni tampoco le preocupa-, el extravío de los 200 millones de pesos o la no existencia del acelerador lineal, ya que ambos se encuentran enfocados en buscar un sustituto que le cubra las espaldas y las Cuentas Públicas chuecas, el primero, mientras la segunda, pretende ganar la candidatura a gobernador el próximo año, así que, como el chorrito, el llamado Hospital Regional de Especialidades de la Comarca Lagunera, se hizo chiquito, hasta quedar en una clínica general en la que los equipos adquiridos en el año 2016 simplemente se perdieron, sin que nunca Aispuro Torres, le haya interesado investigar.
Opacidad; el escudo para desviar fondos públicos en la construcción y equipamiento del Hospital General desde Jorge Herrera Caldera a José Aispuro Torres
Al finalizar julio de 2015, casi al cumplir 5 años de gobierno, Jorge Herrera Caldera, acompañado de funcionarios federales colocó la primera piedra en lo que, según él, sería el Hospital Regional de Especialidades de la Comarca Lagunera, con una inversión de 900 millones de pesos.
La policlínica contaría con 120 camas, 4 quirófanos estables, 2 ambulatorios, más 33 consultorios.
Nada de esto se ha cumplido a cabalidad.
Por el contrario, lo único que ha subido es el costo de las instalaciones que, a decir de Aispuro Torres, se han gastado 1 mil 200 millones de pesos y, todavía en enero de 2019, el gobernador duranguense, pidió al secretario de Salud federal, Jorge Alcocer, 550 millones de pesos más para terminar la policlínica, es decir, la mitad de lo que se había invertido hasta esos momentos, incluidos los equipos médicos destinados a atender las enfermedades crónicas como el cáncer.
Tan manipulado ha estado el dinero destinado a este nosocomio que, en septiembre de 2019, Aispuro y su secretario de Salud, dejaron ver que se requerían 23 millones de peso para tender el cableado adecuado para ese tipo de sanatorio.
En la clínica, no existían siquiera transformadores adecuados.
Mas:
Para esas mismas fechas, la empresa constructora PRODEMEX reclamó adeudos pendientes por al menos 100 millones de pesos.
Entonces, “El Gobernador del Cambio”, culpó de todos los faltantes a Jorge Herrera Caldera, pero nunca investigó los quebrantos presupuestales cometidos durante la construcción del hospital (Por corrupción en Durango, ejército y no el gobernador prianista, Rosas Aispuro, contratará personal médico https://democratanortedemexico.com/2020/05/07/por-corrupcion-en-durango-ejercito-y-no-el-gobernador-prianista-rosas-aispuro-contratara-personal-medico/ ) .
José Rosas Aispuro, suciedad administrativa
Convencido de no castigar a ninguno de los funcionarios públicos que han saqueado Durango, – más ahora que intenta cubrirse las espaldas de las malversaciones de fondos públicos cometidos por él y su esposa Elvira Barrantes Velarde en el DIF estatal-, José Rosas Aispuro Torres busca impunidad, desde el momento que hizo caso omiso del compromiso constitucional de fincar responsabilidades a los cientos de ex burócratas que se han beneficiado de manera particular e ilegal del dinero oficial, intentando alianzas que no lo lleven ante un juez una vez terminado su periodo gubernamental como consecuencia del desvío de bienes públicos.
De hecho, ya vive en ese camino con la promoción de uno de sus delfines políticos, el alcalde de Durango, Jorge Salum del Palacio, miembro del PAN que se fortificó y curó de penosa enfermedad a raíz de vislumbrar la posibilidad de ser el gobernador que releve a Aispuro Torres.
El asunto es que el régimen aispurista carga con tanta suciedad administrativa y social como el de Jorge Herrera Caldera, ambos embarrados hasta las cachas del mal uso presupuestal en el Hospital General de Gómez Palacio, que se concibió como un Hospital Regional de Especialidades de la Comarca Lagunera, enfocado a combatir el cáncer y, que ha terminado en un hospital municipal, que aun mantiene demasiadas carencias con todo y que pasaron 6 años desde que se puso la primera piedra y se han destinado al menos1 mil 200 millones de pesos.
José Rosas Aispuro, en el sector salud, cuentas negras
Las tasas de mortalidad por los carcinomas en La Laguna y el estado de Durango, se encuentran en aumento, año tras año.
Con todo esto, el acelerador lineal, que iba a montarse en el llamado Hospital Regional de Especialidades de la Comarca Lagunera, simplemente no apareció en la inauguración del nosocomio, como tampoco se conoce el destino de los 8 millones de dólares que declaró el ex secretario de Salud de la entidad, César Franco, que ya se tenían.
La interrogante es donde quedaron esos dineros ya etiquetados, al igual que los 186 millones 518 mil 015 pesos que reportó Jorge Herrera Caldera como gastados en equipamiento del hospital,-con al menos 10 proveedores-, instrumentos médicos que nunca han aparecido.
Recordemos que Aispuro Torres, ha sido duramente cuestionado por la opacidad con la que operó 500 millones de pesos para combatir el SARS-COV2 generador del COVID-19 (José Rosas Aispuro, manejos turbios y opacidad en 500 millones de pesos, usados contra COVID-19 https://democratanortedemexico.com/2020/07/08/jose-rosas-aispuro-manejos-turbios-y-opacidad-en-500-millones-de-pesos-usados-contra-covid-19/ ) pero lo que importa es que se entregue el acelerador lineal para combatir los carcinomas que día tras día aumentan en la región de La Laguna.
Que a José Rosas Aispuro no le interesa la vida humana, está claro, tampoco la legalidad, ni los partidos políticos; él busca negociar con las bandas de mafiócratas una salida de impunidad de una gestión gubernamental sucia, llena de desvíos millonarios en las Cuentas Públicas, de la entrega millones de pesos de recursos públicos a empresarios y, de sus cercanos convertidos en un sexenio en los neo millonarios del estado.
Ya se verá en que termina la historia de este gobernador que prometió castigar legalmente a los saqueadores de Durango, ahora ya se encuentra en esta lista.
Twitter: @jmonrreall
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