la experiencia y disciplinado trabajo del poeta Eduardo Hidalgo. La selección hecha por el propio Ferlinghetti, escribió, permite deducir su criterio,
consecuencia de puntos de vista que toman en cuenta las cualidades poéticas y la historia de su propia obra y una formidable observancia en la calidad.Foto Roberto García Ortiz
nfinita la espléndida vida del mundo
Infinitos los seres encantadores que viven y respiran
los seres encantadores que sienten
ven y escuchan y tienen sentimientos
y piensan
ríen y bailan suspiran y lloran
en infinitas tardes infinitas noches
de amor y éxtasis dicha y desesperanza
beben y se drogan hablan y cantan
en infinitas Ámsterdams de la existencia
con infinitas conversaciones alegres
acompañados de infinitas tazas de café
en cafés literarios en mañanas lluviosas
Infinitas películas callejeras que pasan
en coches y tranvías del deseo
sobre los infinitos rieles de la luz
Y bailes infinitos con cabello largo
al compás del sofocante punk rock y la estúpida música disco
desde la medianoche de la Vía Láctea
hasta los Paradisos del alba
hablan y fuman y reflexionan
acerca de todo infinitos por las noches
en el blanco de la noche la luz de la noche
Ah sí oh sí infinita la vida y el amor
el odio y el amor el beso y el asesinato
Infinito el vaivén de la cortadora de carne
de la vida, su respiración y su crianza
se prende y se vuelve a prender con el tiempo
Vida infinita y muerte infinita
aire infinito y respiración infinita
Palabras infinitas en días interminables
en las capitales del otoño
con avenidas de hojas incandescentes
Infinitos los sueños y el sueño que revela
las mangas tejidas del cariño
los laberintos del pensamiento
los laberêves del amor
las espirales del deseo y la nostalgia
miríadas de finales de lo innombrable
Infinitos los paraísos en llamas
infinito el universo que gira
El mundo sobre una pira de hongos
Infinito el fuego que respira dentro de nosotros
tragafuegos tatuados que bailan en plazas
comen llamaradas de gasolina
Valiente el corazón que late de la vida en llamas
sus latidos sus pulsaciones y el vaho de fuego
Infinitos los campos abiertos de los sentidos
el olor de la lujuria y el amor
los llamados insistentes de los muchachos en celo
su perfume de estro de almizcle
Que no termine el sonido de hacer el amor
el rechinar de los resortes de la cama
los quejidos de los amantes al hacerlo
que se escuchan a través de los muros por las noches
Que no terminen los gemidos de éxtasis
quejidos del último clímax que se perdió
el sonido de la rocola que brinca
con el fluir del jass y el gyzm
bailados en el Paradiso
Y después los infinitos intentos de escapar
de la nausée de Sartre
de las despejadas lomas de sensación consumida
joie de vivre en desesperanza
barcadas de iluminación
navíos de merde a flote junto a la fosa de Caronte
avaricias histerias paranoias
contaminaciones y perversiones
Infinito homme revolté
en el rostro anónimo de la muerte
en las vías del estado monstruoso
Infinitas sus visiones anarquistas
infinita su alienación
infinita su poesía alienada
ladilla del estado Mensajero de Eros
Infinito el sonido de esta vida del hombre en la Tierra
sus transmisiones infinitas de radio y televisión
periódicos que se desenrollan rollos infinitos en las prensas rotativas
el flujo de sus palabras e imágenes
sobre infinitas cintas de máquinas de escribir
escritos y garabatos automáticos
infinitos los poèmes dictés por el inconsciente
Infinitas las llamadas telefónicas a partes del mundo
la espera de los amantes en estaciones de trenes
el llanto de las aves en colinas y azoteas
el constante graznar de los cuervos en el firmamento
las miríadas de cantos de los grillos
los mares paseantes las aguas que lloran
suben y bajan en lejanas playas de guijarros
el golpeteo de las mareas
en los Idus del otoño
beso salado de la creación
Que no termine el tañido de las campanas marinas
más allá de las presas y los diques de la vida
y el llamado constante de las campanas
en templos vacíos y torres del tiempo
Que no termine la pronunciación calamitosa
del hombre sagrado e hirsuto
Infinito el perpetuo estiramiento
resorte del corazón del mundo
que resplandece en el tiempo
brilla a través del espacio
Infinitos los botes de turistas que pasan por él
bateaux mouches en canales infinitos
millones de ventanas encendidas en la puesta de sol
la Ciudad arde con la luz restante
la zona roja se mece y brilla
con porno infinito y vergas de neón
y vibradores que vibran infinitamente
en habitaciones del último piso de casas inclinadas
Infinito el masticar
en los sándwiches de carne de la lujuria
los jugosos bistecs del amor
infinitos los sueños y los orgasmos
rituales de fertilidad y rituales de iniciación
y el vuelo de aves fértiles sobre los tejados
y el descenso de los huevos en nidos y matrices
las tentaciones y los intentos de la carne
en habitaciones amuebladas del amor
donde canta la paloma afligida
Que no termine el nacimiento de bebés
donde el amor o la lujuria se han acostado
que no termine el dulce nacer de la conciencia
que no terminen sus amargas muertes en vano
Que no termine que no termine la marchitez
del pelaje y la fruta y la carne, que pasa con su blancura
y las sirenas de neón
que cantan para ellas en algún lugar
Infinitas las ligeras variaciones
de lo totalmente conocido
los fuegos de la juventud las brasas de la edad
la furia del poeta vuelto a nacer
Que no termine que no termine ninguna creación
en la silente danza de las moléculas
Todo es transmutado Todo es silenciado
y todo grita una y otra vez
Infinita la espera por Dios y Godot
los planes absurdos las acciones y obras de teatro absurdas
dilemas y demoras
El absurdo y la espera sin acción
por la desaparición de la guerra
y la desaparición del estado
¡Loca la espera sin acción
por el loco final!
Infinitas las guerras del bien y el mal
las vueltas del destino los viajes del odio
infinitos los misiles y las fallas a prueba de errores
en infinitas reacciones en cadena del último destello
mientras las Bicicletas Blancas de protesta
aún circulan lentamente a su alrededor
Porque llegará el fin de los dioses cara de perro
de zapatos de punta de ala de pantuflas Gucci
de botas texanas y cascos de aluminio
que presionan botones en refugios subterráneos
Porque no hay fin para las elecciones esperanzadoras
que aún no han sido elegidas
las mentes oscuras iluminadas
los senderos de la gloria
los gigantes verdes de la oportunidad
los anzuelos de la esperanza en el pantano de la desesperación
las colinas a la distancia las aves en el arbusto
arroyos de luz escondidos y melodías nunca escuchadas
sesiones de dulce pensamiento silencioso
los majestuosos domos del placer por decreto
y las muertes felices del corazón todos los días
las vergas de arcilla
los pies en tenis para correr
sobre el muelle
Y no hay fin
para las puertas de la percepción que aún no han sido abiertas
y las corrientes en chorro de luz
en el aire superior del espíritu del hombre
en el espacio exterior dentro de nosotros
en las Ámsterdams del yin y el yang
¡Infinitos rubaiyats e infinitas beatitudes
infinitos shangri-las infinitos nirvanas
sutras y mantras
satoris y sensaras
Bodhiramas y Boddhisatvas
karmas y karmapas!
¡Infinito el canto de Shivas que danzan
en los úteros humeantes del éxtasis!
¡Brillan! ¡Trascendente!
en la noche cristalina del tiempo
en el infinito silencio del alma
en el largo y ruidoso cuento del hombre
en su infinito sonido y su infinita furia
que todo lo nombran
con sus infinitas alucinaciones
adoraciones aniquilaciones iluminaciones
erecciones y exhibiciones
fascismo y machismo
circos del alma descarriada
tiovivos de la imaginación
coney island de los dementes
¡infinito el poema dictado
por la voz no colectiva
del inconsciente colectivo
que se nubla sobre los rieles del tiempo!
En los últimos días de Alejandría
El día anterior a Waterloo
El baile no para
Hay un sonido de fiesta en la noche
Ámsterdam, Julio de 1980
*Publicado con permiso de la revista Círculo de Poesía. Traducción de Eduardo Hidalgo
No hay comentarios:
Publicar un comentario