Horizonte ciudadano
Rosa Esther Beltrán Enríquez
Junio 21 de 2018
Ya no es novedad, cada año es lo mismo ¡Aléjate, eres indeseable!, pero paga por tu rechazo, ese parece ser el mensaje que envía la UA de C a los aspirantes que pretenden ingresar a la educación media superior y superior. No los acepta, pero les cobra una y otra vez.
Es desolador, terrible que a nuestros jóvenes se les niegue el DERECHO instituido en el artículo 3° constitucional que establece como una obligación del Estado impartir la educación media superior (EMS) de calidad y gratuita. Durante la mayor parte de este siglo, rechazar a los aspirantes al bachillerato es práctica común, las universidades sí tienen recursos para pagar altos salarios a sus funcionarios de los primeros niveles de dirección, pero no pueden aceptar a los aspirantes egresados de las secundarias.
El antecesor de Salvador Hernández Vélez ganaba más de 129 mil pesos y el oficial mayor, tesorero general, director de asuntos académicos y otros se embolsan más de 100 mil mensuales (Vanguardia 16-10-17), aunque da la impresión de que, la universidad está prácticamente en quiebra, va en reversa, no hay progreso, los bajos salarios de los profesores parecen revelarlo, porque dicen los que saben, que una buena parte del presupuesto universitario y del estado se destina a un clúster empresarial muy exitoso, me parece algo descabellado, pero eso comentan los enterados, a mí no me pregunten ni me demanden.
Pero volviendo a los rechazados; que la UA de C cierre sus puertas a 20 mil jóvenes y sólo acepte a 10 mil para bachillerato y el nivel superior, revela que la exclusión no se detiene, y que los jóvenes son una generación que ha padecido los efectos de un desarrollo económico sin crecimiento, y además sufren varias crisis, como el desempleo, la pobreza y la marginación de sus familias, procesos que han desencadenado riesgos como la inducción hacia las adicciones, problemas de salud mental y el suicidio; de por sí el mote de “rechazados” es un estigma y la cantidad de excluidos crece.
El problema de la exclusión a los jóvenes de la EMS y ES ha generado fuertes reclamos a nivel nacional y la exigencia al derecho a esos estudios se han revivido en toda su crudeza, cada año cientos de miles de jóvenes exigen un lugar en las preparatorias y en las universidades.
Ante esta problemática sin solución para los gobiernos del PRIAN, en el Proyecto Alternativo de Nación 2018-2024 del partido Morena, se establece que de llegar Andrés Manuel López Obrador a la Presidencia de la República se gestionará que los jóvenes rechazados en las Instituciones de EMS y Educación Superior (ES) que en las 2 áreas sumarían más de 300,000 sean incorporados a un “Proyecto Educativo Emergente” otorgándoles una beca anual de 29 mil pesos, con el propósito es disminuir la cantidad de los que quedan fuera de la EMS y facilitarles su acceso al sistema de ES o que se incorporen al mercado laboral; para ello el Proyecto contempla un perfil adecuado de 5000 profesores preparados para contrarrestar los efectos negativos del contexto social y con una sólida formación profesional, se estima que el impulso a este proyecto requeriría de una inversión pública de 9 mil millones de pesos, aproximadamente.
Se sabe que en alguna medida el número de jóvenes que no pueden ingresar a las universidades públicas es a causa de las políticas dictadas por los organismos financieros internacionales, el Banco Mundial, y la OCDE, y que el PRIAN las adopta de manera ortodoxa a sabiendas de que influyen para hacer de la educación no una palanca del desarrollo de este país, sino un mercado para los capitales privados, de ahí el crecimiento explosivo de las universidades patito.
Posdata
Me congratulo de que la Suprema Corte de Justicia de la Nación haya dictaminado que la terminación del contrato de MVS-Aristegui en marzo de 2015 es ilegal y violó la ley. Una de cal…
No hay comentarios:
Publicar un comentario